La policía detuvo esta madrugada a un joven de 17 años que llevaba cinco bombas de estruendo y un aerosol en su mochila. Es que desde anoche, jóvenes que comienzan su último año de secundaria, celebran en la ciudad el último primer día de clases. Si bien los festejos se desarrollaron con tranquilidad, un grupo de chicos realizó pintadas y tiró bombas en la puerta del colegio Maristas, de Oroño al 700.
Según indicaron fuentes policiales, la Brigada Motorizada detuvo al menor en Oroño y Urquiza, tras el llamado de un vecino que se quejó por los disturbios.
El detenido fue trasladado a la comisaría 2ª y puesto a disposición de la Justicia, tras hallarse en su mochila la pirotecnia y un aerosol azul, color con el que se hicieron las pintadas.