Contra lo anticipado por sindicatos que respaldan al presidente Mauricio Macri –que aseguraron que el gobierno no avanzaría en una reforma laboral al menos este año– y por integrantes del propio elenco gobernante que descartaron un plan “a la brasileña”, el ministro de Trabajo Jorge Triaca enviará esta semana al Congreso nacional un proyecto que da luz verde a tercerizaciones, rebaja indemnizaciones, habilita cambios en la jornada laboral y abre las puertas a pasantías y más figuras de empleo precario. Así lo advirtió el portal Infogremiales (www.infogremiales.com.ar), que tuvo acceso a la iniciativa, cuya base elaboró a principios de año el secretario de Empleo, Miguel Ponte, y “se parece bastante” al plan que en teoría no se iba a encarar. Frente a ese escenario, la CTA de la provincia, el Movimiento Sindical Rosarino y las regionales de la CGT de Santa Fe, San Lorenzo, Reconquista, Rafaela y Venado Tuerto –que junto a otros sectores dejaron conformado el Movimiento Obrero Santafesino– emitieron un fuerte comunicado en el que reafirmaron “la defensa irrestricta de los convenios colectivos de trabajo, del sistema previsional solidario y de las obras sociales de los trabajadores”.
Profundizando la línea de los acuerdos sectoriales –el primero fue el de los petroleros de Vaca Muerta en enero y el más reciente con los trabajadores del sector lácteo– el gobierno busca avanzar en la modificación de la ley de Contrato de Trabajo, con el objetivo propuesto de “promover la liberación de las fuerzas de la producción y del trabajo de todos aquellos mecanismos regulatorios”.
Entre los puntos que repasa en el borrador, Infogremiales menciona “la eliminación de las indemnizaciones a favor del trabajador por incumplimiento en la registración, total o parcial, de su contrato de trabajo y su remuneración”.
También la figura del “trabajador autónomo económicamente dependiente”, análoga a la introducida en Brasil y que hasta ahora es considerada un fraude laboral penalizado, al falsear una relación de dependencia encubriéndola como una locación de servicios. La idea es ahora admitir prestación de “servicios personales para una empresa o persona física en hasta un 80% de sus ingresos anuales, excluyéndolo del régimen del contrato de trabajo y remitiendo a una regulación estatutaria especial”.
Se propone “la exclusión del régimen del contrato de trabajo de los «trabajadores independientes y sus trabajadores independientes colaboradores», creando una zona de exclusión de la ley laboral para quienes trabajen para otros”, marcó Infogremiales.
Figura entre las propuestas la creación de un banco de horas a ser establecido mediante los convenios colectivos de trabajo, por el cual el cómputo de la jornada máxima, diaria o semanal, pasaría a ser anual, “permitiendo compensar los excesos de jornada a lo largo de un año y sin pago de recargo por horas extra”.
Otro punto: un aumento de la jornada diaria, en orden al sistema de cálculo en base a promedios, de 8 a 10 horas.
SE propone la eliminación de la base de cálculo para la indemnización por despido del SAC (aguinaldo), horas extra, comisiones, premios, compensaciones de gastos “y todo otro rubro que no tenga periodicidad mensual”.
Plantea la creación del “Fondo de cese laboral”, que permitirá financiar a los empleadores las indemnizaciones por despido, a través de los convenios colectivos, “sustituyendo por dicho fondo las obligaciones previstas en la ley de Contrato de Trabajo”.
Abre un “Sistema de Prácticas Formativas”, es decir pasantías, que alcanzará a graduados universitarios por un año y con una jornada de hasta 30 horas señales de trabajo.
Abre un “blanqueo laboral”, con referencia en el aplicado en la década del 90: si se declara a un trabajador no registrado dentro del plazo de 180 días de vigencia de la ley, se condonan todas las deudas por aportes, contribuciones, infracciones, multas y recargos. Incluso se produce la extinción de la acción penal.
Luz verde a las tercerizaciones, a través del cepo a las llamadas acciones judiciales denominadas por solidaridad. Esas demandas son las que incluyen no solo al empleador de la actividad del trabajador sino también a la empresa que desarrolla la actividad principal, que hasta ahora era solidariamente responsable frente a un despido injustificado.
Con todo, ahora los cambios deberán transitar por el compromiso de “consenso” que la cúpula de la CGT dijo haber recibido del ministro Triaca. En rigor, una de las líneas se está cumpliendo, aunque con trampa: el respeto a los convenios colectivos. Llegaría a tal punto que los acuerdos sectoriales tendrían primacía sobre la ley.
Contrarreforma
“Acuerdos sectoriales son ademanes de cachetazos”, advirtió el titular del gremio de Obras Sanitarias de Rosario, Oscar Barrionuevo, quien pidió “mesas de consenso” por la reforma laboral. “Debemos estar atentos, unidos y organizados y prestos al dialogo en serio”, remarcó el dirigente, para quien se debe “exigir al gobierno nacional la preservación de los puestos laborales o en su defecto siempre debe estar la calle con todos los trabajadores”. En análoga posición, el titular del Sindicato Químico de San Lorenzo, Julio Barroso, propuso reformas a partir de experiencias exitosas en países desarrollados como “disminución de horas semanales de trabajo sin disminución en la remuneración” y “jubilación a los 60 y 55 años”, entre otras.
“No vamos a permitir que se vulneren derechos”
La asamblea de organizaciones gremiales que se reunieron ayer en la sede de la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales (Festram) en Santa Fe dejó conformado el Movimiento Obrero Santafesino con la CTA provincial, regionales de la CGT, el Movimiento Sindical Rosarino y otros sectores– sentó posición frente a los anuncios del presidente Mauricio Macri y los trascendidos sobre el proyecto de reformas laboral, previsional y tributaria que impulsa el gobierno.
“Las trabajadoras y trabajadores santafesinos no vamos a permitir que, por favorecer a las corporaciones económicas, se vulneren derechos y garantías laborales que el conjunto de los Argentinos hemos conseguido con nuestro esfuerzo y lucha durante décadas”, advirtieron las corrientes gremiales en el documento. Y sostuvieron que el proyecto de reforma laboral presentado “tiene como principal objetivo flexibilizar los convenios colectivos, lo que provocará peores condiciones de trabajo y pérdida del poder adquisitivo del salario”.
“El movimiento obrero santafesino advierte que la reducción de los aportes patronales provocarán la destrucción progresiva del sistema previsional solidario, con la baja del salario a los jubilados y con la intención de privatizar dicho sistema y volver al modelo de las AFJP”, dice otro párrafo del documento, en el que se manifestaron “a favor de una reforma tributaria equitativa donde se favorezca a los sectores sociales más vulnerables”.
Finalmente el Movimiento Obrero Santafesino se puso “a disposición de todas las organizaciones sindicales de la provincia” para continuar generando un “espacio de encuentro y acción” y avanzar en “la unidad en la acción de la clase trabajadora” como “el camino para defender la dignidad de los trabajadores”.
