Fuerzas de seguridad sirias dispararon ayer contra manifestantes en una de las mayores marchas de protesta realizadas en dos meses y medio de revuelta popular contra el presidente Bashar al Assad, y al menos 46 personas murieron por la represión, dijeron activistas.
La marcha en la ciudad central de Hama coincidió con la movilización de cientos de miles de personas en todo el país en una jornada nacional de protesta convocada por la oposición para honrar la memoria de los más de 30 niños muertos por la represión desde el inicio de la rebelión, a mediados de marzo.
Soldados y policías abrieron fuego contra otra marcha de opositores en una segunda localidad, el gobierno cortó el servicio de internet en la mayor parte del país y el Ejército bombardeó por cuarto día una ciudad del centro del país sitiada desde el sábado pasado, donde al menos dos personas murieron.
El corte de internet, un duro golpe a una oposición que hasta ahora motorizó las protestas con videos subidos a YouTube o con convocatorias a marchas a través de las redes sociales, se suma a severas restricciones impuestas por el gobierno a la prensa extranjera.
Organizaciones de derechos humanos sirias dicen que más de 1.100 personas murieron por la represión de la revuelta, que empezó con un reclamo de mayores libertades pero escaló a una exigencia de renuncia de Assad, que está en el poder desde 2000 pero cuya familia controla políticamente el país desde hace 40 años.
Luego de las plegarias musulmanas de los viernes, cientos de miles de personas salieron de las mezquitas y marcharon por ciudades y pueblos de todo el país. La represión más feroz ocurrió en Hama, donde al menos 44 personas murieron por los disparos de la Policía.
El gobierno afirma que la revuelta es obra de pandillas armadas y extremistas religiosos.
El Ejército sirio, además, bombardeó la ciudad central de Rastan con artillería y mató al menos a dos civiles, informó el grupo Comités de Coordinación Local, que ayuda a organizar y documentar las protestas del país.
Los bombardeos de la ciudad central de Rastan y de otras dos localidades vecinas más pequeñas comenzaron el martes pasado y hasta ahora dejaron al menos 74 muertos, según los Comités.