Gente que se va y gente que llega a Rosario en medio de la pandemia para reencontrarse con sus familiares la noche del 24. Pese a la ansiedad de muchos al cabo de meses sin poder estar con sus afectos, y la fiesta navideña, la Terminal de Ómnibus Mariano Moreno no registró ningún desborde este jueves.
Las únicas aglomeraciones que se observaron en la estación fueron en las plataformas y en el momento del ascenso o descenso de los ómnibus, pero todo controlado y sin desbordes según relataron varios de los presentes.
La Terminal inició una lenta vuelta a la actividad hace unos días por la habilitación nacional de los viajes de larga distancia por rutas. Potenciales turistas o familiares de residentes en otros distritos comenzaron a acercarse a las boleterías para sacar pasajes o asesorarse, pero hasta el momento hay poca información y sólo algunos destinos, con escasa frecuencia, operativos.
Más demanda que oferta es el diagnóstico de los empleados de las empresas de transporte. Las consultas fueron primordialmente para destinos turísticos. El dilema, en muchos casos, gira alrededor de las exigencias sanitarias de cada provincia para aceptar a los visitantes que remite a los cuadros epidemiológicos particulares. Es un combo de heterogeneidad que suma incertidumbre para la elección de las vacaciones.
En medio de ese escenario, varios pudieron concretar este jueves su viaje a otras geografías del país o su llegada a Rosario en ómnibus, pero sin atorar la Terminal de calle Santa Fe y Cafferata.