«Se ha iniciado el diálogo, el inicio ya marca una vocación; hoy el gobierno mandó una señal fantástica, de compromiso, que debería augurar que nos vamos a sentar en la mesa, que ya es todo un inicio», dijo Méndez en declaraciones radiales.
En ese sentido dijo que la negociación debe ser entre «trabajadores, empresarios y Gobierno» y aclaró: «Después vemos quién representa cada lugar, quién tiene la mejor predisposición, y quien tenga la peor predisposición tendrá que salir del juego».
Méndez consideró que «tiene que haber una cuota de renuncia de cada uno para negociar, negociar significa ceder, para que el resultado final sea mejor para todos». «Ojalá la Argentina haga el cambio, nosotros nos vamos a esforzar para imaginarlo, si hay condicionamientos a priori no me siento», agregó.
En ese contexto, señaló que además de las negociaciones «hay una política macro que tiene que dar el marco adecuado para que todas las variables armónicamente conduzcan a tener menos inflación, más crecimiento, más inversión».
Por último, llamó a «tratar de garantizar que la Presidenta tenga un marco no traumático; lo menos que uno tiene que hacer es tironear. Hay que negociar, eso permite que la gestión de quien tiene que gobernar día a día sea más liviana».
En declaraciones a otra radio porteña, Méndez admitió que «no todos los empresarios son buenos, pero hay muchas actitudes sindicales que son muy malas».
«Ni Hugo Moyano es la CGT, ni Méndez es la UIA, ni todos los empresarios son la UIA», subrayó el industrial, quien señaló que la actitud de la entidad que preside es «apostar» al diálogo con la cúpula sindical.
El viernes pasado, en la Conferencia Industrial de Costa Salguero, la Jefa de Estado instó a cámaras empresarias y gremialistas a iniciar un proceso de diálogo para debatir salarios, del cual también participará el Gobierno.