Victoria Arrabal – Universidad de Rosario (UNR)
El contexto social es complejo en cuanto a posibilidades reales de acceso a la justicia y las políticas públicas destinadas a garantizar este derecho, no son suficientes. Ante esta realidad, la UNR creó un área de Acceso a la Justicia que funciona desde hace ocho años en barrios vulnerables de la ciudad y la región. Un equipo de 50 estudiantes y jóvenes graduados guiados por docentes de la Facultad de Derecho dan respuestas a las demandas y problemáticas socio-legales de la comunidad. Desde hace dos años también se incorporaron estudiantes y egresados de las carreras de Psicología y Trabajo Social para abordar los temas de forma interdisciplinaria.
Este servicio es gratuito y confidencial, y para quienes lo brindan es una forma de vincularse con el medio, lograr un compromiso recíproco y una experiencia enriquecedora pre profesional. Antes de ir a los barrio quienes van a asesorar hacen encuentros de preparación y formación sobre las diversas temáticas necesarias para los abordajes territoriales, fundamentalmente en materia de justicia y salud.
Esta formación previa se realiza para establecer líneas de trabajo y se otorga un seguro de responsabilidad por cualquier eventualidad. El objetivo es generar conciencia de la responsabilidad y el compromiso que requiere ir a un lugar donde hay tantas necesidades.
En el terreno se reciben consultas y derivan, cuando corresponde, los casos. En las bibliotecas y clubes barriales se atienden generalmente demandas de personería jurídica, balances, memorias, reformas de estatutos, actualización de nómica de autoridades, entre otras.
Balance
Entre los problemas relevados estuvo el de tramitar pensiones o subsidios que hoy no existen más. Los problemas actuales más comunes se refieren a alimentos y régimen de familia, tenencia de los hijos y visitas. También sobre problemas con las sucesiones en los barrios en los que viven muchas personas en una misma casa y se dividen los terrenos. A esto se suman las problemáticas laborales y de jubilados que cobran la mínima y tomaron microcréditos que ofreció la Anses y ahora se les dificulta pagar.
“La mayoría de las veces no llegamos a la judicialización. Para un vecino que vive en un barrio alejado del centro de la ciudad y necesita averiguar un tema es útil porque lo orientamos a dónde tienen que ir, que documentación llevar”, afirma el director del área, Joaquín Chiavazza.
El área está vinculada con graduados que ya pasaron por ella y trabajan en espacios contra la violencia de género, ya sea en la UNR, la provincia y la Municipalidad de Rosario. En la actualidad, dan asesoramiento a La Florida, Empalme Graneros, Santa Lucía, La Lagunita y en Granadero Baigorria.