Daira Monzón tiene 13 años y padece retinoblastoma, cáncer en los tejidos de la retina. Su papá, Claudio, murió de cáncer hace dos meses y su mamá, Betiana, es ciega. Esta familia rosarina de barrio Triángulo necesita ayuda para sobrevivir y el colegio San Francisco Solano -institución a la que asiste la nena desde jardín de infantes- lanzó una campaña solidaria para recaudar fondos.
“El papá de Daira hizo muchos tratamientos y la exposición a los rayos le generó tumores en los huesos. Claudio lo tenía en el brazo y Daira lo tiene en la base del cráneo, entre el ojo y la nariz”, lamentó Betiana.
Por su enfermedad, Daira está con tratamientos paliativos, pero su dolor no cesa. “Toma calmantes para no sufrir tanto dolor. Desde hace un tiempo no va a la escuela por ese motivo”, contó su mamá.
Betiana no tiene trabajo y cobra una pensión que no ayuda demasiado en la economía familiar. “Tengo un hijo mayor, de 19 años, que hace changas. Pero nada alcanza en los tiempos que corren. Agradezco mucho esta cruzada solidaria que hace el colegio”, cerró.
Para el que quiera colaborar, en el banco Santander pueden hacerse los depósitos a nombre de Betiana Edith Martínez y su «alias» es «cereza.dona.cielo».
La historia de Claudio, papá de Daira
Claudio Alejandro Monzón fue jugador de Los Murciélagos, la selección argentina de fútbol para ciegos. Era delantero veloz, fuerte y experto en diagonales que enloquecían a los defensores. Hincha fanático de Boca, cumplió el sueño de usar la de 10 de sus ídolos Maradona y Riquelme.
En el primer superclásico de la historia del fútbol 5 para ciegos, Claudio hizo el único gol del partido frente a River, el gol del triunfo, en mayo de 2016 en el Cenard.
Debutó en la Asociación Rosarina de Deportes para Ciegos y fue campeón de la Liga Nacional de fútbol 5 para ciegos en 2009. Luego pasó por su amado Boca junto a Silvio Velo y en 2017 se incorporó al nuevo equipo Fundación Paradeportes – Cañuelas FC, donde se transformó en figura y goleador. También brilló en Peñarol de Montevideo y en equipos de Brasil.
Jugó en Los Murciélagos durante 10 años y participó de la Copa América Buenos Aires 2009, la Copa Río de la Plata 2010; la Copa del Mundo para Ciegos Hereford 2010; la VIII Copa América Santa Fe 2013 -de la que fueron subcampeones- y la Copa Binacional Mendoza 2015. Claudio murió el 19 de junio, día del Padre.