Los trabajadores y trabajadoras autogestionados asociados en Cooperativas de Trabajo remarcamos desde un principio nuestro apoyo a las medidas para la protección de la salud implementadas por el Estado Nacional en el marco de la pandemia y enfatizamos la necesidad de un Estado activo y presente.
Asimismo señalamos que nuestro sector, el de las Cooperativas de Trabajo, ha sido excluido de cada una de las medidas económicas adoptadas para paliar la crisis actual. Hemos solicitado en más de una ocasión, y sin respuesta favorable hasta el momento, la necesidad de incluir taxativamente a las Cooperativas de Trabajo en las medidas de apoyo financiero al trabajo y la producción.
Nuestro sector agrupa a 18.000 trabajadores y trabajadoras, si se toman en cuenta sólo a las 400 Cooperativas de Trabajo surgidas en procesos de recuperación de empresas. Este número asciende a 80.000 trabajadores y trabajadoras si tomamos en cuenta el universo total de Cooperativas de Trabajo. Las cifras nos convierten en un eslabón más que importante en la cadena de producción de bienes y servicios de la economía nacional.
En esta línea se expresó el titular del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (Inaes), Mario Cafiero, quien juzgó que la pandemia “puso al desnudo que existen 10 millones de argentinos que están afuera de todo”, al tiempo que consideró “vital” el rol de la economía social “en la construcción de la etapa post coronavirus”.
Por eso vemos con preocupación la discriminación que sufre nuestro sector al no ser incluidos en la Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción. En el marco del programa ATP implementado por el Ministerio de Desarrollo Productivo se ha asistido a grandes empresas, dejando de lado al conjunto de trabajadores y trabajadoras del movimiento cooperativo, como si se tratara de la existencia de trabajadores de primera y de segunda categoría. Al movimiento cooperativo lo formamos trabajadoras y trabajadores comprometidos con el desarrollo productivo del país.
La situación actual es dramática para nuestras cooperativas: necesitamos respuestas urgentes para poder seguir produciendo. Reclamamos con urgencia la inclusión de todas las cooperativas de trabajo en la Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción.
El trabajo autogestionado merece la atención que hasta ahora no recibió. No podemos volver a la normalidad, porque la normalidad era el problema.
