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“Las finanzas públicas no están en emergencia”, desmiente el Frente Progresista

El ex ministro Gonzalo Saglione y la diputada provincial del Frente Progresista Clara García, desmienten al gobierno de Omar Perotti. Cuestionaron el rojo de diciembre, le bajaron el tono a la deuda flotante y defendieron la gestión de Miguel Lifschitz

“Hace dos meses en la agenda pública de los santafesinos estamos discutiendo como si fuese una provincia seriamente comprometida en términos fiscales y la realidad objetiva y los propios números de la nueva gestión dicen que no lo está”, sostienen desde el Frente Progresista en la previa del debate legislativo por la ley de emergencia (o de Necesidad Pública) que solicita como herramienta necesaria la gestión de Omar Perotti, que incluye un pedido de endeudamiento por 27 mil millones de pesos.

El ex ministro de Economía de Miguel Lifschitz, Gonzalo Saglione, y la actual diputada provincial socialista Clara García desgranaron, en una reunión de la que participó El Ciudadano, los números oficiales que dio a conocer el actual titular de la cartera económica Walter Agosto. Para los dirigentes del Frente Progresista, hay errores metodológicos, números confusos y algunas omisiones que magnifican la “herencia” recibida: “Las finanzas públicas no están en emergencia”.

 

Déficit exagerado

El primer punto de conflicto fue el déficit que arrojó el ejercicio 2019: 18.656 millones de pesos. “Nos sorprende y nos llama mucho la atención que si al 30 de noviembre, el último cierre nuestro, el déficit era 8.200 millones de pesos, por qué de repente saltó a 18.600 millones, casi 10.500 millones en un solo mes, diciembre, en el cual el manejo del devengamiento del gasto es responsabilidad del nuevo gobierno”, lanzó Saglione.

Explicó que si bien el último mes del año genera mayores gastos por el pago de aguinaldo, no llega en ningún caso a un déficit semejante. Recordó que en la mesa de transición, a mitad del año pasado, el rojo hasta el momento era de 10.000 millones y que luego de perder las elecciones (y hasta entregar en diciembre) el gobierno de Lifschitz obtuvo un superávit de 2.381 millones.

Los funcionarios dijeron que no pueden analizar a fondo ese déficit porque la provincia no cargó los datos desagregados en la página de Responsabilidad Fiscal. “Ya venció el plazo para la publicación de diciembre que nos hubiera permitido ver de dónde salieron estos números”, agregó García.

 

Gastos corrientes y totales

Otro de los señalamientos del peronismo era el incremento del gasto del gobierno frentista. En este punto, Saglione resaltó que los gastos corrientes y los gastos totales crecieron por debajo de la inflación (50,8 y 48% respectivamente) por lo que cayeron en “términos reales”. Pero además en un escenario de recesión y en donde el gobierno nacional le quitó recursos a la provincia.

En ese marco, el Frente Progresista tomó la decisión política de “hacerse cargo”: “Los gastos corrientes se incrementaron, para cuidar a los santafesinos en un contexto de quita de subsidios al transporte y a la energía. Estas medidas impactaron en un aumento de los gastos corrientes, que de todas formas se mantuvieron por debajo de la inflación. Por otro lado, hay que destacar, en lo que respecta a los gastos de capital, que se decidió sostener la obra pública, que fue nuestra prioridad, como política contracíclica”.

En ese lapso, el gobierno nacional quitó ingresos por 4.000 millones de pesos (reducción de impuesto a las Ganancias e IVA) y no pagó el déficit de la Caja de Jubilaciones (5 mil millones). “Nosotros dejamos al 30 de noviembre un déficit de 8.200 millones, si no nos hubieran restado los 4 mil millones y si hubiéramos cobrado en término los 5 mil, era superávit”, expresó García.

“Esos son factores ajenos a decisiones del gobierno provincial. Los gastos sí son decisiones del gobierno de la provincia y acá es cuando nos hacemos cargo. Los gastos corrientes crecieron por debajo de la inflación. No hubo un problema de gastos en 2019, hubo un problema de recursos, atribuible a la recesión que nadie buscó pero existe y a decisiones del gobierno nacional”, aportó Saglione.

 

Deuda flotante y Fuco

Los números difundidos por Agosto señalan una deuda flotante de 27 mil millones de pesos (para este ítem solicitan endeudamiento por 12 mil millones), desde el Frente Progresista la desestiman por tendenciosa. Porque en esa bolsa se cuentan los sueldos, jubilaciones y coparticipación a municipios y comunas, que se pagan los primeros días del mes. Por lo que consideran que la deuda flotante exigible es solamente la de proveedores y contratistas, que al 30 de noviembre era inferior a los 5 mil millones de pesos.

“Es coherente con lo que dijo la ministra (de Infraestructura Silvina) Frana: la deuda con contratista son 3.500 millones y después 800 millones de proveedores de insumos, sumados estamos en 4.300 esa es la deuda flotante exigible”, dijo Saglione.

En el mismo sentido, en la gestión peronista cuentan como deuda 16.450 millones de pesos del Fuco (aquí también solicitan deuda por 15 mil millones para su “recomposición”). En el Frente Progresista alegan que no existe tal deuda porque uno no puede “deberse a sí mismo”, el Fuco es un fondo que se puede utilizar a costo cero. “Es como decir que tengo una billetera en cada bolsillo, decido gastar y elijo con cual gasto, la plata es mía, son dos bolsillos del mismo pantalón. El espíritu del Fuco es que tenés un montón de cuentas bancarias por diferentes conceptos, si en alguna te está faltando no le vas a pedir a nadie, primero fíjate si en alguna otra tenés plata y prestátela a tasa cero porque es una locura que si te falta en una y te sobra en otra, vayas a pedir plata y pagar interés”, ejemplificó Saglione.

 

El peso de la deuda

“Vamos a suponer que la deuda flotante es de 27 mil millones, tomo ese dato que para mí es incorrecto. En 2007 la deuda flotante en relación al presupuesto cuando asume Hermes Binner y cuando Agosto deja de ser ministro es de casi el 10%. Al 2019 es el 7,2%. En una perspectiva histórica Perotti heredó una deuda flotante inferior a la que dejó el PJ cuando se hizo el traspaso en 2007”, expresó Saglione.

 

Presupuesto 2020

Otra de las novelas del verano fue la sanción del Presupuesto 2020, elaborado por la gestión saliente pero modificado en la Legislatura por la fuerza política que se hizo cargo de la provincia. La proyección del déficit es de 8.138 millones de pesos pero los dirigentes del Frente Progresista dijeron que el peronismo omite informar que luego de sancionada la ley de leyes, la provincia contará con más recursos fruto de 15.000 millones extra por las leyes nacionales de Solidaridad y 6.000 millones por las modificaciones al Consenso Fiscal.

“El Frente Progresista gobernó la provincia en un contexto adverso y siempre dio respuesta con un Estado presente. Entregamos una provincia ordenada, con menos deuda que en 2007 y con 100 mil millones de pesos por cobrar. Las finanzas públicas de la provincia no están en emergencia. Perotti y su equipo cuentan con instrumentos financieros, económicos y políticos de sobra para gestionar la provincia”, sintetizaron.

 

“Daño a los santafesinos”

Para Saglione, hablar que la provincia está en emergencia es “un daño real que le están haciendo a la actividad económica productiva de santafesina”. “Se discute que Santa Fe es una provincia fundida. Imagínate un inversor que ve que quien gobierna la provincia dice que Santa Fe está mal, no invierte en Santa Fe. No es un daño a la gestión saliente, es un daño a los santafesinos. Decir durante todo este tiempo que Santa Fe está en crisis terminal… pareciera que no se puede gestionar sin estas herramientas discrecionales que pide el gobierno de Perotti y esto no es así”, concluyó.

De todos modos, Clara García indicó que el Frente Progresista está abierto al diálogo: “Hacemos un aporte de lo que creemos que es correcto, lo hacemos con toda la honestidad intelectual. Pero eso no quita que estamos para el diálogo y vamos a colaborar en el consenso que se llegue”.

 

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