“Cuando le iban a notificar la libertad con formación de causa, lo encontraron fallecido”. Eso es lo que ocurrió con un joven de 21 años que estaba detenido en la comisaría 21ª se barrio Alvear por amenazar a su pareja. La versión oficial indica que el hombre se había ahorcado, y la muerte es ahora motivo de investigación.
Voceros de la fuerza de seguridad señalaron que en las dependencias de avenida Arijón al 2300 el personal de la seccional ingresó al sector del penal transitorio con un detenido, al que identificó como L. Eso ocurrió alrededor de las 20.05. El hombre –siempre según la versión oficial– comunicó que otra persona que permanecía privada de libertad en el lugar estaba muerta. Lo identificaron como Jesús Cuellar, de 21 años. Tras el aviso, los agentes revisaron el sector y asentaron que el fallecido tenía una tela de color rojo atada al cuello.
El personal médico del servicio de emergencias Sies arribó a la comisaría y comprobó que efectivamente el detenido estaba muerto. Posteriormente, acudió la fiscal Mariana Prunotto, quien reclamó la presencia de la Policía de Investigaciones y la Dirección de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad.
En un arrebato de dolor y bronca, familiares del muerto protagonizaron el viernes por la noche incidentes frente a la comisaría. Según voceros de Fiscalía, el origen de los disturbios se debe al reclamo del cuerpo: la autopsia se efectuará recién el próximo martes, por lo que los restos del muerto no podrán ser entregados hasta entonces.
Esta causa por disturbios que incluyeron rotura de vidrios y del frente de la comisaría está en manos del fiscal del Flagrancia Walter Jurado.
En tanto, la misma fuente indicó que el Ministerio Público de la Acusación coordinó con el servicio de defensa pública la aplicación del Protocolo de Minnesota, una guía adoptada como norma por las Naciones Unidas sobre cómo llevar a cabo una autopsia en pro de establecer si la persona fallecida fue torturada.