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Le robaron el celular a un allegado a Guille Cantero: el Chaque se hizo el picante y terminó preso

Dijo ser "sobrino de Ramírez" y a los gritos les exigió a los uniformados que fueran a buscar su móvil porque los iba a hacer echar a todos; su amenaza no surtió efecto. Le saltó captura por una condena condicional por encubrimiento: entre las restricciones no podía contactar al líder de Los Monos

Un joven de 25 años fue detenido este sábado en Granadero Baigorria tras un episodio de ira luego de un aparente robo de su celular. Le gritó a la policía que fueran tras los ladrones “andá a buscarlos, yo soy sobrino de Ramírez el jefe, porque sino, los voy a hacer echar a la mierda. Yo soy el Chaque, veni a ver quién soy. Te voy a cagar a puñetes”. Pero lejos de lograr el cometido terminó detenido. Este lunes fue imputado por resistencia a la autoridad y amenazas, quedó preso en forma preventiva por un mes.

El hecho se registró la madrugada del sábado cuando desde el destacamento del Hospital Eva Perón, en Granadero Baigorria, se pidió un móvil policial para colaborar en un disturbio que estaba ocurriendo en la zona. Al llegar los uniformados se toparon, en avenida San Martín y Eva Perón, con un grupo de personas que habían salido de un boliche.

Uno de los jóvenes gritaba que dos personas le habían robado el celular y se dieron a la fuga. El damnificado no quiso hacer la denuncia y les gritaba a los empleados policiales “andá a buscarlos, yo soy sobrino de Ramírez el jefe, porque sino los voy a hacer echar a la mierda. Yo soy el Chaque, vení a ver quién soy. Te voy a cagar a puñetes”.

Cuando intentaron retenerlo, hizo un además que tenía algo en la cintura y escapó a pie. Un empleado policial disparó con una escopeta con cartuchos antitumulto, según relató la fuente policial.

A la altura de Arenales al 100 un móvil policial logró detenerlo, cuando intentó meterse en una estación de servicios. Allí el joven, identificado como Sebastián G., comenzó a gritar nuevamente “mañana mismo con mi abogado los denuncio a todos, hijos de puta. Van a ver, no trabajan nunca más y sino les voy a cagar a tiros la casa a cada uno de ustedes. No tienen idea quién carajo soy yo. Soy el Chaque”, refiere el parte policial.

Cuando averiguaron su identidad contaba con un pedido de captura activo por una causa de encubrimiento. Había sido condenado a una pena condicional de dos años y debía cumplir por ese plazo reglas de conducta, entre las que figuraba una prohibición de contacto con Ariel «Guille» Máximo Cantero, Carlos Damián «Toro» Escobar y Ariel Esquivel.

Imputación

Este lunes fue imputado del hecho ocurrido el fin de semana, le achacaron los delitos de resistencia a la autoridad y amenazas a los uniformados. El fiscal Lucas Altare pidió una medida cautelar que fue otorgada por la jueza María Trinidad Chiabrera, hasta el 30 de noviembre salvo que antes la Fiscalía presente acusación en su contra.

Condena previa

El joven ya contaba con una condena por encubrimiento, a través de un procedimiento abreviado. El muchacho reconoció que adquirió un auto a sabiendas que su procedencia era ilícita.

Según la acusación retiró un Mini Cooper rojo de una concesionaria ubicada en Constitución al 300. El auto terminó secuestrado en una causa de amenazas; los investigadores estimaron que el vehículo se utilizó en el hecho.

Finalmente la fiscalía restituye el auto en marzo del 2022 a este joven, circunstancia que ocultó a la concesionaria y a la titular del auto, quienes al enterarse se lo reclaman pero el joven les dijo que lo vendió ante un estado de necesidad y que ya no tenía ni los papeles.

En junio del año pasado el encargado de la concesionaria encontró el auto en Alem al 1300 y llamó al 911. Personal policial se hizo presente en el lugar y apareció una persona identificada como Gabriel G. quién dijo ser el dueño pero no pudo demostrarlo por lo que quedó demorado.

Gabriel Sebastián G. reconoció su participación en este hecho y fue condenado a 2 años de prisión condicional por encubrimiento agravado por ánimo de lucro; además fijó una serie de reglas de conducta entre ellas no mantener contacto por ningún medio con Ariel Máximo «Guille» Cantero, Carlos Damián «Toro» Escobar y Ariel Esquivel.

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