Este miércoles la Comisión Bicameral de Acuerdos de la Legislatura provincial abrió un proceso disciplinario al fiscal Matías Edery tras la denuncia de sus pares Miguel Moreno y Pablo Socca, luego de las escuchas que se conocieron -en una audiencia por un caso de extorsión- entre el funcionario y Mariana Ortigala, una testigo de la causa que terminó con pena de prisión perpetua para el jefe narco Esteban Alvarado, devenida en colaboradora del fiscal y hoy imputada y presa. A ello se sumó una denuncia del propio Alvarado contra los fiscales Matías Edery y Luis Schiappa Pietra que llevaron adelante la investigación en su contra.
“Hemos definido avocarnos al procedimiento que el auditor (del MPA Leandro Mai) había comenzado con su inhibición del caso de Matías Edery, que tiene mucha trascendencia. La Legislatura y la Comisión de Acuerdos definió que es importante. Lo más sano institucionalmente es que nos aboquemos a la investigación, que sea responsable y transparente, como la situación que atraviesa el Ministerio Público de la Acusación nos indica”, dijo la diputada Lionella Cattalini, titular de la Bicameral, a Radio 2.
La designada para llevar adelante el sumario es la legisladora Lorena Ulieldin -socialista, igual que Cattalini-, mientras que por el momento diputados y senadores no se expidieron sobre la situación de la jefa de los fiscales rosarinos, María Eugenia Iribarren, quien declaró en el marco del proceso contra Edery y, según dijeron algunos legisladores, no quedaron despejadas las dudas sobre su actuación en el presente caso, especialmente en lo atinente a la calidad de «testigo protegida» o informante de la luego imputada en los fueros provincial y federal Mariana Ortigala.
Denuncia de Alvarado
En las últimas horas se sumó una nueva denuncia que presentó a través de sus abogados y en 29 fojas el hoy condenado Esteban Alvarado. El convicto dijo que las acusaciones que hoy giran en torno de Edery ya las había hecho a comienzos de 2022 y aseguró que Schiappa Pietra, quien encabezó la acusación junto con su par, es igual de responsable.
“No busco subirme al tren”. Aseguró que viene a ratificar y denunciar formalmente lo que dijo en reiteradas oportunidades a lo largo del juicio por homicidio y asociación ilícita al que fue sometido el año pasado.
Habló sobre presunto “actuar ilegal de ambos fiscales” y apuntó especialmente a la relación entre la testigo estrella de su causa Mariana Ortigala y el fiscal Edery. Hizo referencia al conflicto con ella y su hermano Rodrigo, condenado en un caso que tuvo a ambos fiscales como acusadores, en relación con una casa en Funes.
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“(Rodrigo) Ortigala se acordó, en diciembre de 2018, de reclamar una casa que supuestamente le saqué en febrero del 2012?, se acordó en diciembre de 2018, casi siete años y medio después. Yo no le saqué ninguna casa a Ortigala, mal vendió la casa él, porque supuestamente tenía problemas conmigo, pero yo no mal vendí la casa, él mal vendió la casa, y después la quiso reclamar porque estaba bajo la cobertura de Los Monos. ¿O no saben los Fiscales que Los Monos son Ortigala, Ortigala son Los Monos”.
Y agregó: «Entonces pienso, la Fiscalía volcó la balanza, la Fiscalía volcó la balanza para todo aquél que declarara en contra mío. Le abría las puertas, le daba medialunas, le servía café a todos los que declararon en contra mío, la fiscalía les abría las puertas. Casualidad hace un año pasó lo de Peiti; Ortigala estaba metido, él era el que entregaba la casa. Lo imputaron y lo largaron. Mi hermano sin tener nada que ver, está detenido y le dieron cuatro años, nunca lo largaron a mi hermano. Se vé que los fiscales con Ortigala tenían otro trato», dijo.
En cuanto a su ex ladero luego asesinado Carlos Argüelles, refirió Alvarado: «Lo mataron a Carlitos, lo mataron y nadie hizo nada. ¿Qué salió a decir la fiscalía? Lo único a decir que fui yo. ¿No puedo ser un vuelto de los Cantero? No puede ser un vuelto, no, no, fue el Esteban, según la fiscalía. Aseguró que al “saltar sus abogados por lo que se estaba diciendo desde la fiscalía le dijeron “fíjense lo que van a hacer porque nosotros metimos en cana a los abogados de Alvarado”. Eso, a la jerga acá se llama, es una extorsión, es una extorsión“delicada”, aplican mafia con papeles, porque son fiscales y ¿quién los investiga a ellos?”.
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En cuanto al crimen de Rodrigo Sánchez, quien era otro de sus alfiles, dijo que el que fue condenado Jonathan Brezik, hermano de crianza de Ariel “Guille” Cantero, surge que el hecho se cometió en respuesta al atentado que sufrió Mariana Ortigala, aseguró y habló del crimen de la sindicada narco Natalia Salinas: “Todos sabían que hablaba con el fiscal, que estaba con el fiscal, que había capturas del fiscal, nadie lo investigó, bueno, ya que lo digo acá, si queda grabado, que se investigue. Porque ellos piden que se investigue a todo el mundo ¿Por qué no los investigan a ellos?».
Alvarado dijo sobre el momento en que la Fiscalía le propuso en un juicio abreviado: “Me preguntó si yo sabía algo de Pipi Traferri, qué voy a decir si yo no lo conozco a Pipi Traferri. Pero si yo hubiese inventado algo, la hubiese sacado más barato”. La referencia es al caso de juego clandestino en el que Edery y Schiappa Pietra pretendieron, hasta el momento sin éxito, imputado al senador sanlorencino del justicialismo Armando Traferri.
Finalmente dijo Alvarado: “Esta causa se usó, esta, mi causa, para tirarle mierda a Traferri, a (la vicegobernadora Alejandra) Rodenas, a un abogado. ¿Qué tienen que ver Rodenas y Traferri en esta causa? Y ustedes lo escucharon, pero si yo declaraba en contra de Traferri “No”; me hubieran firmado un abreviado y capaz que en ocho años me iba a la calle, pero como no me presté al juego de la Fiscalía acá estoy declarando».
Alvarado cerró con que los fiscales «se amparan en las figuras del imputado colaborador e informante a la hora de realizar acuerdos ilegales con imputados a cambio de otorgamiento de beneficios procesales indebidos».
