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Leves penas por feroz balacera que dejó seis heridos, entre ellos una niña de 9

Cinco sospechosos detenidos desde enero de 2017 por atacar a tiros a una familia de zona oeste acordaron condenas de entre 3 y 6 años con la Fiscalía por tentativa de homicidio, y portación y tenencia de arma de fuego. Las víctimas fueron cuatro mujeres y un muchacho, además de la nena, de 9 años

A comienzos de 2017 una brutal balacera contra una vivienda de zona oeste dejó seis heridos, entre ellos cuatro mujeres y una nena de 9 años con un tiro en el pecho. Los investigadores barajaron distintas hipótesis sobre el sangriento ataque: una discusión tras un choque esa misma jornada; una venganza por un homicidio cometido un año antes, y hasta parte de disputas territoriales por la venta de droga al menudeo en los barrios Villa Banana, Triángulo y Vía Honda.

Una quincena de allanamientos derivó en la detención de cinco sospechosos pocos días después del hecho. El quinteto continuó detenido sin ir a juicio hasta esta semana, cuando acordó penas de entre 3 y 6 años de prisión con la fiscal Marisol Fabbro por los delitos de tentativa de homicidio, y portación y tenencia de arma de fuego. Tras firmarse el acuerdo, dos de los condenados recuperaron la libertad por haber pasado casi toda la pena con prisión preventiva.

El ataque ocurrió a las 0.30 del 14 de enero de 2017, cuando tres hombres dispararon a mansalva contra una vivienda de pasaje Deliot al 5300. Los plomos hirieron a seis personas. Iris P., entonces de 9 años, recibió un tiro en tórax; Marta A., de 37, cinco tiros en el abdomen y el tórax; Claudia A., de 24, dos balazos en las piernas; Érica N., de 14, un balazo en la cadera; Georgina G., de 20, tres tiros en pierna izquierda mientras que Brian N., de 20, recibió cinco tiros en la espalda, el abdomen y una pierna. Todos sobrevivieron.

Los testigos dijeron que tres atacantes bajaron de un Chevrolet Astra y se pararon frente a la casa, armas en mano. Una joven que vivía en el lugar intentó frenarlos y recibió un fuerte culatazo en la cabeza. Luego abrieron fuego.

Días después, cuando la fiscal Fabbro fue al hospital a entrevistar a las víctimas, descubrió que el único varón herido tenía pedido de captura por haber sido mencionado en un homicidio perpetrado un año antes. Se refirió al crimen de Raúl Ramón Acevedo, quien tenía 25 años cuando lo asesinaron el 15 de febrero de 2016 en 27 de Febrero y Lima. Por su muerte ya había sido imputado un hermano del joven baleado. Pese a la distancia en el tiempo de ambos hechos, no se descartó que los casos estuvieran relacionados.

También se investigó si un siniestro de tránsito al que le siguió una pelea entre dos muchachos del barrio agravó los ánimos. La tarde anterior a la brutal balacera de enero de 2017 una riña a trompadas enfrentó a Brian (el joven luego baleado) con el apodado Mauri, uno de los detenidos.

Pero también quedaron bajo la lupa de los pesquisas las disputas territoriales por el narcomenudeo entre barrios vecinos de zona oeste, ya que hubo más balaceras antes y después de aquel sangriento ataque. De los 16 allanamientos que se realizaron luego del atentado, cinco personas fueron detenidas. Todas ellas acordaron este jueves penas en un juicio abreviado, en una audiencia en la que no se ventilaron los resultados de la investigación judicial.

La Fiscalía informó este jueves que el juez Pablo Pinto homologó el acuerdo. En el mismo, David Alarcón, de 24 años, fue condenado a seis años de prisión por los delitos de tentativa de homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego en carácter de coautor (en seis hechos), además de portación y tenencia ilegítimas de arma de fuego de uso civil y de guerra. Por el mismo delito recibió la misma condena Carlos Darío Quispe, de 26 años. En tanto, a Mauricio Ayala, de 24, lo condenaron a 5 años y 4 meses de prisión efectiva por los mismos delitos, excepto el de portación de arma.

En tanto, la pareja que recuperó la libertad, Celeste y Ubaldo Pérez, de 22 y 32 años, firmaron condena a tres años de prisión también por el delito de tentativa de homicidio, pero como partícipes secundarios. Ambos estaban acusados de permanecer armados en la puerta del domicilio atacado para impedir que los residentes puedieran entrar o salir; y por ello la pena a la que fueron condenados incluyó también los delitos de portación y tenencia de arma.

A ambos se le dictó el cese de prisión y la libertad por “encontrarse excedido el plazo que llevaban sujetos a la prisión preventiva en relación a la pena de cumplimento efectiva”, informó la Fiscalía.

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