El massismo lanzará esta semana un plan de protección del empleo, propuesta mediante la cual ayudará al gobierno de Mauricio Macri a frenar la ley antidespidos que impulsa parte de la oposición y a la cual el propio presidente manifestó su rechazo.
“Buscamos crear un plan de sostenimiento y fomento del empleo para pyme, para aquellas empresas con menos de 40 trabajadores”, dijo el diputado Marco Lavagna, del interbloque Unidos por una Nueva Argentina (UNA), a través de un comunicado.
La semana pasada, la comisión de Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados emitió un dictamen de mayoría firmado por legisladores de las principales bancadas opositoras (el kirchnerismo, el massismo y el peronismo dialoguista que lidera Diego Bossio) para impulsar un proyecto de ley que prohíbe los despidos entre marzo de este año y diciembre de 2017.
Tras ese dictamen, el presidente Macri salió a rechazar la iniciativa y este fin de semana el massismo anunció “una propuesta superadora” con la cual el gobierno apuesta a hacer fracasar la ley antidespidos en la Cámara baja.
Lavagna sostuvo que en su propuesta “las empresas que hayan mantenido o incrementado la planta de trabajadores respecto del mes de noviembre de 2015 podrán acceder al plan” de beneficios.
“Analizamos las problemáticas existentes con la situación del empleo como la pérdida de puestos de trabajo que viene incrementándose pero a su vez analizando el contexto desfavorable que vienen atravesando las pyme por el aumento de tarifas, el fuerte aumento de las tasas de interés que le cortó todo acceso al crédito y al capital de trabajo junto la fuerte caída de la actividad económica y la verdad es que hoy a las pyme les está costando llegar a fin de mes”, subrayó Lavagna.
Señaló que “dentro del proyecto de ley” que presentará el espacio que lidera el diputado y ex candidato presidencial Sergio Massa, se plantea “la continuidad de la emergencia ocupacional hasta el 30 de junio de 2018 y no hasta diciembre del 2016, como modificó el gobierno”.
“Aquellas empresas que incorporen programas sociales descuentan el 50 por ciento del haber en concepto de impuestos y para las pyme es del 100 por ciento. Lo importante de esto es que sea un puente al mercado laboral y el mercado laboral pueda absorber al trabajador con un plan social en dos años”, explicó Lavagna.
El legislador massista resaltó que su propuesta establece que cuando las grandes empresas echen empleados deberán realizar un trámite “a través del Ministerio de Trabajo ante los despidos sin justa causa por un período de 24 meses” y que esa cartera “deberá informar de manera mensual los despidos aprobados por ellos”.
“La manera que creemos es la adecuada para evitar los despidos es a través de un régimen de incentivo fiscal para pymes que se desarrolle mes a mes. Por ejemplo, cuando pueda acreditar la misma dotación de personal que en noviembre de 2015, hasta cinco trabajadores, descuentan un salario mínimo, vital y móvil, entre 6 y 25 trabajadores descuentan dos, más de 25 trabajadores tres”, ejemplificó Lavagna.
Desde el kirchnerismo acusan una jugada de “mala fe”
El presidente de la bancada kirchnerista de la Cámara baja, Héctor Recalde, criticó ayer al Frente Renovador por “ayudar” al gobierno de Mauricio Macri a frenar la ley antidespidos y recordó que al dictamen de este proyecto lo firmaron esta semana “todos los bloques de la oposición”. Mientras que Diego Bossio, legislador del bloque Justicialista, ratificó su apoyo a la iniciativa de la oposición aunque pidió darle “tratamiento diferenciado” al proyecto de ley del massismo que apunta a las pyme.
Para Recalde, “el dato objetivo de la realidad es que todos los bloques de oposición firmamos este proyecto”. “Tenemos la voluntad de ayudar a las pyme y a los trabajadores. Si alguno entiende que este proyecto no satisface del todo, lo resolvemos en un día, nos juntamos todos los bloques y se presenta un proyecto de ley”, aseveró Recalde en declaraciones radiales para cuestionar al Frente Renovador.
“Se desconoce el contenido de la ley o hay mala fe. Lo que se prohíbe es el despido sin causa justificada y cuando un empresario tiene problemas económicos hace el procedimiento preventivo de crisis y ahí el gobierno tiene la ocasión de ayudar a las pymes”, explicó el diputado kirchnerista.
También cuestionó al presidente Macri por haberse declarado en contra de la iniciativa antidespidos: “Cuando dice que aumentó el desempleo por la ley del 2002 es exactamente lo contrario: bajó de 26,7 por ciento al 8,8, no sólo no se destruyó sino que bajó el desempleo”.
Por su parte, y ante el probable acuerdo entre el oficialismo y el Frente Renovador para bloquear la ley antidespidos, Bossio marcó la cancha y “volvió a manifestarse a favor de su tratamiento”.
No obstante, aclaró que para el sector que él lidera es fundamental incluir en el proyecto un “tratamiento diferenciado” para las pyme.
Además, Bossio pidió implementar tarifas diferenciadas para las pyme en electricidad, agua y gas, ya que, según señaló, los aumentos aplicados son “letales” para la economía de estas empresas.
En tanto que el jefe del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), Ricardo Pignanelli, sostuvo ayer que no le sorprende que el Frente Renovador haya decidido no acompañar la ley antidespidos porque en esa fuerza política hay mucha gente “del empresariado”.
“No me sorprende porque el espacio donde está Massa está muy acompañado de la gente del empresariado. Mas allá de que estuvieron convencidos de acompañar el proyecto de Macri en la realidad efectiva despacito van saliendo las cosas a la luz”, señaló.
En declaraciones radiales, el gremialista destacó que en la década del 2000 esa norma ayudó al crecimiento: “La historia dice que cuando se tuvo que poner la ley antidespido en la década del 2000 dio sus resultados. A partir de ahí fuimos creciendo”.