Dos familias de San Nicolás están atravesadas por el dolor y el desconsuelo de tener que hacer una peregrinación para exigir justicia luego de que el camionero que el pasado 16 de septiembre pasó un semáforo en rojo, atropelló y mató a dos de sus seres queridos, quedara en libertad. La medida fue dispuesta por el juez Ricardo Prati al finalizar la imputación del fiscal Julio Tanus al conductor por doble homicidio culposo doblemente agravado por la pluralidad de víctimas y por violación de la señalización del semáforo.
El 16 de septiembre era lunes. El choque fatal fue a las 21.12 y quedó registrado en la cámara de seguridad de un comercio. En la filmación que está en poder del fiscal nicoleño se ve que la moto que conducía Rodrigo Rial, de 20 años, y llevaba como acompañante a su novia, Brisa Romero, de 24, transita por Chacabuco y cruza la avenida Viale en verde cuando se les atraviesa el camión con Pablo Alejandro Nozzi, de 62 años, al volante.
La joven pareja falleció casi en el acto y desde ese momento, al dolor de perder a sus seres queridos, sus familiares se tuvieron que mover para conseguir las pruebas que daban cuenta de que no habían sido ellos los que pasaron en rojo.
Vanesa Videla, mamá de Rodrigo, contó en entrevistas radiales y a medios gráficos que esa misma semana se presentó en la comisaría 3° para interiorizarse de la investigación del siniestro que se cobró la vida de su hijo.
“Hablamos con algunas personas que estuvieron esa noche y dijeron que apenas pasó el choque, llegó un patrullero con personal de la 3°, había dos policías y una uniformada. Los dos agentes fueron con el camionero, se bajó ya hablando por celular. Lo metieron en el móvil mientras que la mujer policía fue donde estaban los chicos. Después llegó la ambulancia.Llegué alrededor de las 22 y cuando pregunté ya se lo habían llevado. Cuando vi el acta no había casi nada de precisiones y otras cosas estaban mal”, aportó Vanesa para graficar las situaciones por las que tuvieron que pasar y que hicieron que fuera acrecentando su indignación.
El camionero se presentó a la semana, se puso a disposición de la Justicia al mismo tiempo que los familiares de Rodrigo y Brisa empezaron a dar entrevistas porque notaban que, a pesar de que el fiscal había solicitado medidas, el personal de la comisaría 3° no las llevaban a cabo, describió la mujer.
Incluso aportaron videos de los reclamos que les hicieron el 2 de octubre pasado cuando se movilizaron a la seccional para exigir respuestas. “Mi instinto de madre me decía que algo estaba mal. Mi hijo no tenía una infracción de tránsito, no me cerraba. Vine a la comisaría y no habían pedido las cámaras ni los antecedentes penales. A mí me dijeron que el domo andaba y que habían enviado todas las actuaciones, al hermano de Brisa les dijeron que no funcionaba. Nosotros hicimos todo el trabajo, hablamos con los vecinos y también nos encargamos de pedir las cámaras que pudieran haber registrado el choque”, sostuvo Vanesa mientras agregaba que uno de los testimonios que había en el acta policial decía que Rodrigo y Brisa habían pasado en rojo, cosa que el video que aportaron a este diario muestra lo contrario.
Nozzi llegó en libertad a la audiencia imputativa del martes 8 de octubre donde el fiscal Tanus lo acusó por el delito de doble homicidio culposo doblemente agravado por la pluralidad de víctimas y por violación de la señalización del semáforo. Tras escuchar a las partes, el juez Prati aceptó la calificación y resolvió que transite el proceso en libertad con prohibición de salida de la ciudad y del país, y de manejar vehículos por el plazo de 4 meses en los que también tendrá que presentarse a firmar en la dependencia policial.
Esto generó más dolor en los familiares de las víctimas. “Lo único que quiero es justicia y que a ninguna mamá le pase lo que me pasó a mí: tener que estar con el dolor de perder un hijo y ocupándose de hacer lo que le corresponde al personal de la comisaría 3°, no puede ser”, concluyó Vanesa, quien agradeció el acompañamiento de amigos, vecinos y conocidos en este difícil momento.