Los cuatro jugadores de Patronato de Paraná Matías Pardo, Axel Rodríguez, Juan Barinaga y Justo Giani, y el entrenador de arqueros, Damián González, fueron liberados este miércoles tras pasar una noche en la sede del Ministerio Publico Fiscal (MPF) por «el delito de lesiones y atentado y resistencia a la autoridad», según la fiscal especializada en Eventos Masivos y Espectáculos Deportivos, Celsa Ramírez.
Los protagonistas quedaron imputados bajo la misma carátula y pasaron un total de 14 horas en detención, entre las tres horas que vivieron con la policía en los vestuarios de la cancha de All Boys y en la madrugada paseando en una camioneta de policía para no «compartir la cárcel con otros delincuentes», coincidieron todos al salir.
La Policía de la Ciudad se interpuso cuando todos los jugadores se le fueron encima al árbitro Jorge Baliño y en el accionar policial se armó un semicírculo en el que recibieron agresiones, según vieron por la TV, dos policías mujeres.
El resto de la delegación, que también estuvo demorada, se encuentra en Paraná, donde regresó anoche, a la espera del partido del domingo contra Boca, a las 18.00.
«Todavía estamos demorados, toda tuya, Baliño», escribió el defensor Lautaro Geminiani en Instagram.
Además, la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) acompañó con la presencia del vicepresidente Marcelo Achile, directivo de Defensores de Belgrano, y un abogado.
El primero en pisar la calle fue el delantero Axel Rodríguez, quien contó que no la pasaron «nada bien» al verse detenidos de algo en lo que no fueron «culpables».
«Estamos esperando volver para Paraná. Estamos amargados por la situación aunque nos sentimos fuertes», apuntó en diálogo con los medios presentes.
Patronato, que tiene 14 puntos en una gran campaña en el segundo semestre de la mano de Facundo Sava, pelea por permanecer en la Liga Profesional y se coloca último en los promedios (0.976), a siete puntos de Aldosivi y a ocho de Central Córdoba de Santiago del Estero.
El segundo en obtener la liberación fue Matías Pardo, quien aclaró que no iba a «hablar» sobre el polémico arbitraje de Jorge Baliño aunque coincidió en el sentimiento de «tristeza».
«Estamos tristes, salió en todo el mundo lo que sucedió. Vivimos una noche horrible. Estábamos separando y la policía tomó la decisión de detenernos. El abogado se encargará de presentar nuestro descargo», detalló.
Posteriormente salieron en conjunto Juan Barinaga y Justo Giani y Damián González, el entrenador de arqueros.
Los cinco volverán esta tarde a Paraná en el primer vuelo disponible desde Aeroparque -o la otra opción es un vuelo privado dispuesto por la AFA- y cumplirán su día libre tras la dolorosa derrota por 2-1 en Floresta contra Barracas Central.
Además, luego del final polémico, en el que le anularon un gol a Raúl Lozano por un penal previo -Pablo Mouche lo falló-, en el que no se vio claramente la falta y el gol del colombiano Sebastián Rincón.
En la jugada, Baliño, que parece bien ubicado, hace un gesto claro pidiéndole Brian Calderara, futbolista de Barracas, que se levante y continúa la secuencia que termina con el tanto de Lozano.
«Si no tenía el VAR y tenía la posibilidad de ver una jugada en donde yo me equivoqué, verla nuevamente después del partido, y no poder cambiar la historia, sí me hubiera dado bronca de que por un error mío no se hubiera sancionado algo que era justo. El VAR es una herramienta válida de poder ver en el momento, rectificar o ratificar una acción de campo», explicó Baliño en declaraciones a TyC Sports.
«Barracas venía de perder dos o tres partidos seguidos y no vi que ninguno de mis compañeros dejara de dirigir porque Barracas perdió. Por eso digo que hay una cuestión instalada que no es cierta», justificó.
A su vez, el árbitro aclaró que «nadie» le pegó y que «tampoco habrá futbolistas informados» de cara al futuro.
La reacción del director técnico, Facundo Sava, expulsado en el primer tiempo, dejó abierta la posibilidad de una renuncia aunque según Baliño fue una respuesta en «caliente» cuando aseguró que no será entrenador «nunca más en la vida».
En línea con el árbitro salió Federico Beligoy, Director Nacional de Arbitraje en Argentina, y respaldó: «Las cuatro decisiones tomadas por el VAR están bien sancionadas».
«El primer gol está bien anulado porque es offside. Las cuatro decisiones tomadas por el VAR están bien sancionadas. Esto empieza con una desinformación periodística en la primera jugada. Desde la transmisión y el banco de suplentes se dijo que era un escándalo el offside cobrado, y estuvo bien sancionado», detalló.
«Con la cámara siete encontramos el contacto en el penal. Tenemos la posibilidad de revisar todas y vimos cómo fue claro el toque sobre el jugador de Barracas cuando deja pasar la pelota para enganchar y le tocan el pie», argumentó.