El gobernador Miguel Lifschitz solicitó ayer al ministro de Energía de la Nación, Juan José Aranguren, buscar alternativas para que el aumento de la electricidad, a raíz de la quita de subsidios por parte del gobierno nacional, se aplique de manera gradual, preocupado por el impacto que pueda tener en los puestos de trabajo en algunos sectores de la economía santafesina. Asimismo, se confirmó por parte de la Empresa Provincial de la Energía (EPE) la ampliación de la tarifa social, que ofrecerá beneficios para uno de cada tres clientes residenciales.
Acompañado por el ministro de la Producción, Luis Contigiani, la secretaria de Estado de Energía, Verónica Geese, y el presidente de la EPE, Raúl Stival, Lifschitz planteó ayer a la tarde al titular de la cartera energética del gobierno de Mauricio Macri la necesidad de encontrar alguna alternativa de financiamiento para el aumento que genera en los costos de producción la eliminación de los subsidios a la energía, sobre todo en sectores industriales con alto consumo que emplean a gran cantidad de trabajadores.
“Planteamos a Aranguren la necesidad de amortiguar el traslado del incremento de las tarifas eléctricas a los sectores industriales y comerciales, por cómo esto afecta al empleo, en especial a la provincia de Santa Fe”, comentó Geese al término del encuentro en las oficinas del ministerio en Capital Federal.
“Pedimos que el gobierno nacional, a través de Cammesa, nos permita generar un financiamiento que posibilite un desdoblamiento del pago del incremento tarifario, pensando en hacer más progresivo el impacto sobre la industria y el comercio, sobre todo donde hay fuentes de trabajo comprometidas”, agregó.
“Santa Fe tiene un fuerte perfil industrial, intensivo, con mano de obra calificada y agregado de valor que merece ser tenido en cuenta a la hora de suprimir los subsidios porque impactan en los costos de las empresas”, señaló la funcionaria provincial, y agregó: “Esta situación puede afectar el tejido social y productivo de nuestra provincia, donde tenemos pequeñas y medianas empresas distribuidas en localidades a lo largo y ancho de la provincia. Por eso queremos repartir esfuerzos para evitar despidos y situaciones conflictivas. Debemos contemplar el valor social que representan muchas de estas empresas en nuestra comunidad, y por eso llevamos esta propuesta al gobierno nacional”.
En este sentido, Geese aseguró que aspira a “recibir una devolución positiva por parte del gobierno nacional, porque la propuesta realizada fue razonable y porque la provincia siempre cumplió con sus compromisos”.
“El ministro entendió el planteo y nos pidió hasta la semana que viene para darnos una respuesta, después de un viaje que tiene con el presidente al exterior”, señaló.