Un jubilado de Villa Gobernador Gálvez fue a la Justicia porque Litoral Gas le cortó el suministro sin avisarle. Tenía una deuda por los tarifazos y no le alcanzaba con su pensión para cubrirla. Poco le importó a esa empresa la medida cautelar que firmó hace un año el juez federal de Dolores, Alejo Ramos Padilla, donde prohibía a las prestadoras cortar el suministro a familias que no puedan pagar. Lo cierto es que, a fines de abril último, representantes de la Multisectorial contra los Tarifazos presentaron un recurso de amparo para que al abuelo le volvieran a instalar el gas. Ante eso, el juez Gabriel Abad, del Juzgado de Distrito Civil y Comercial N° 9, estableció una medida cautelar para que se le restablezca en forma inmediata el medidor, sin costo alguno. En ese marco, esta semana personal de Litoral Gas se presentó en el domicilio del jubilado y alegó que por “cuestiones técnicas” no le podían restituir el servicio.
“El inspector de la empresa advirtió que había una pérdida interna en el domicilio del jubilado y le hicieron firmar un acta. Es decir que presentaron un documento por el cual el jubilado reconocía esa pérdida. Abusaron de la ignorancia y de la buena fe de este hombre. Cuándo fueron a cortarle el suministro, ¿no se dieron cuenta de la supuesta pérdida y que le estaban brindando un servicio peligroso?”, se preguntó Juan Alcaraz, abogado de la agrupación que defiende al jubilado.
La cosa no quedó ahí. Según explicó luego Alcaraz, el jubilado de Villa Gobernador Gálvez citó en su casa a un gasista matriculado y verificó que no había pérdida alguna. “La pérdida venía del lado de afuera, de una válvula que le correspondía a Litoral Gas. Frente a eso, el juez Abad ratificó la medida para que la empresa le restituya el servicio”, sostuvo el abogado.
Alcaraz insistió en que hubo un accionar inadecuado de parte de Litoral Gas. “Por un lado, por no restituirle el servicio al jubilado. Y, por otro, para justificar las facturas de alto costo que le llegaron. Es muy confusa la posición de la empresa”, advirtió.
La historia
Durante 2018 le llegaron al jubilado facturas de gas de hasta 12 mil pesos. “Tiene que elegir entre alimentarse o comprarse los medicamentos. No puede pagar el servicio de gas. Las facturas son impagables”, había señalado el abogado de la Multisectorial.
Alcaraz contó que el hombre, de 61 años, sufre de diabetes y es insulinodependiente. “Vive con su esposa –que no tiene ingresos– y además tiene a su cargo a dos nietos, de 10 y 16 años, porque su hija (la mamá de los chicos) murió”, contó.
La Justicia ordenó a Litoral Gas reponer el medidor a jubilado que no pudo pagar
