El Ente Nacional Regulador del Gas (Enargas) instruyó este miércoles a todas las distribuidoras del servicio del país para que diseñen un plan de revisión de las instalaciones internas del servicio en todas las escuelas y colegios que tengan suministro por red. La decisión incluye a Litoral Gas, desde donde aclararon que no habían recibido aún las directivas pero sabían que de un momento a otro se ordenaría la medida. La idea, agregaron, es coordinar con el Ministerio de Educación santafesino las acciones, y ser «prudentes» con su cumplimiento para evitar cortes que no sean imprescindibles. Es que la orden, ya confirmada a nivel nacional, se emite justo en la época de temperaturas más bajas.
La decisión quedó oficializada en la Resolución 201/2018 publicada este miércoles en el Boletín Oficial con la firma del presidente del organismo, Mauricio Ezequiel Roitman, y el resto del directorio. El Enargas instruyó a las licenciatarias del servicio de distribución de gas por redes a diseñar de forma coordinada con las autoridades educativas de su área un protocolo de verificación y un plan de acción para controlar las instalaciones. La seguridad de las instalaciones de gas es el objetivo principal, y las acciones abarcan a todos los establecimientos educativos, oficiales y privados, en todos los niveles, para prevenir siniestros.
La medida fue tomada después de la tragedia ocurrida el 2 de agosto en una escuela de la localidad bonaerense de Moreno. Allí, una pérdida de gas desató una explosión que mató a la vicedirectora, Sandra Calamano, de 48 años, y al auxiliar educativo Rubén Orlando Rodríguez, de 45. En ese caso, hubo, desde el Consejo escolar y la propia dirección de la escuela, avisos previos sobre irregularidades al Ministerio de Educación de la provincia que conduce María Eugenia Vidal.
La resolución oficial publicada este miércoles encomienda a las distribuidoras la presentación de un protocolo al Enargas antes del 31 de octubre. Es un Programa de Prevención que aspira, de acuerdo al texto de la resolución, a generar datos y resultados. Remiten la experiencia a una similar de 2005 que apuntaba a investigar fugas de gas y otras irregularidades relacionadas con la seguridad en 18.701 establecimientos educativos. En ese entonces, como resultado, hubo cortes de suministro y retiro de artefactos con fallas o que no cumplían con las normativas para reemplazarlos por nuevos.
Los siniestros, en general, son la consecuencia de artefactos mal ubicados, falta de mantenimiento (ventilaciones obstruidas o desacopladas), o modificaciones fuera de regla de equipos o instalaciones existentes.
Tal como señalaron a El Ciudadano desde Litoral Gas, las directivas son encarar las inspecciones de manera de causar los menores inconvenientes posibles a la actividad normal de los establecimientos, sin resignar la seguridad. En especial, porque en de ellos funcionan comedores escolares o son sede de actividades comunitarias.
Las distribuidoras deberán informar al Enargas, de forma periódica, el grado de avance de las tareas encomendadas. EL órgano de control, en paralelo, diseñó una normativa sobre el tratamiento de las instalaciones de gas existentes, muchas de ellas con varios años de antigüedad. Lo que se busca es verificar si mantienen sus condiciones de seguridad. Otra iniciativa apunta a elaborar con las autoridades del Programa Procrear, de Mejor hogar y gas una línea de créditos blandos para la adecuación de las instalaciones internas de los domicilios con servicio de distribución por redes.
