El gobierno uruguayo calificó como “exitosa” la llegada de los seis ex prisioneros de la cárcel de Guantánamo que arribaron a Montevideo ayer a la madrugada como parte de la iniciativa para cerrar la prisión estadounidense en suelo cubano.
“Fue todo muy fluido y salió como estaba previsto; no hubo ningún problema, fue totalmente exitoso”, analizó en diálogo con Télam el ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, quien ya fue ratificado para continuar en su cargo a partir del 1º de marzo con el gobierno del mandatario electo Tabaré Vázquez.
“El gobierno de la República Oriental del Uruguay recibe a seis personas que se encontraban privadas de libertad en la cárcel de la Base Naval de Bahía de Guantánamo”, indicó también un comunicado del Ministerio de Relaciones Exteriores que ratificó el arribo de los reos que estaban alojados sin juicio ni condena en la prisión del gobierno de Estados Unidos.
La cancillería del gobierno de José Mujica aseguró que “la posición nacional respecto a esta decisión fue explicitada por el señor presidente de la República en su carta abierta al presidente de los Estados Unidos Barack Obama, de fecha 5 de diciembre”.
“El gobierno de la República Oriental del Uruguay mantendrá respecto a ellos el más estricto apego a las normas de protección internacional humanitaria, de acuerdo a su solicitud de refugio”, agregó la nota.
Los presos llegaron a las 2.55 de ayer en un vuelo sanitario del gobierno de Estados Unidos, y fueron recibidos por el canciller interino Luis Porto, a cargo de un operativo que incluyó varias ambulancias y custodia, informó el portal Subrayado.
Los presos que arribaron son Mohammed Tahamatan, palestino de 35 años; Abu Wael Dhiab, sirio de 43 años, Abd Hadi Faraj, sirio de 39 años; Ali al Shabaan, sirio de 32 años, Ahmed Adnan Ahjam, sirio de 36 años, y un tunecino cuya identidad se desconocía hasta ayer a la tarde.
Se trata del grupo más grande de presos que salieron de la cárcel norteamericana en Cuba desde 2009 y los primeros reclusos en ser reasentados en América del Sur.
Los seis ex detenidos, que podrán moverse libremente por Uruguay, según comunicó el propio Mujica este semana, estuvieron detenidos en Guantánamo desde 2002 sin juicio luego de que fueran hechos prisioneros en Pakistán y luego fueran declarados “liberables” por ser considerados de baja peligrosidad.
Antes de su llegada, Mujica había fundamentado la decisión de alojarlos en la tradición uruguaya, en una carta abierta al “pueblo uruguayo y a Barack Obama” en la que aseguró que debía aprovecharse la llegada de los ahora ex prisioneros para avanzar con otras medidas, como el fin del bloqueo estadounidense a Cuba.
“Recogiendo de nuestro mejor pasado esa vocación (la de asilo a extranjeros en Uruguay), hemos ofrecido nuestra hospitalidad para seres humanos que sufrían un atroz secuestro en Guantánamo”, dijo Mujica en su carta, y subrayó: “La razón ineludible es humanitaria”.
“La ocasión ahora jubilosa es propicia para que reclamemos nuevamente el levantamiento del injusto e injustificable embargo a nuestra hermana República de Cuba, cuyo Héroe Nacional (José Martí) fuera cónsul de Paraguay, Argentina y Uruguay en Nueva York”, dijo el presidente uruguayo.
También propuso en el texto “la liberación de Oscar López Rivera, luchador independentista puertorriqueño de setenta años, preso político en Estados Unidos desde hace más de treinta, doce de ellos en celda de aislamiento”.
“Y la liberación de Antonio Guerrero, Ramón Labañino y Gerardo Hernández, cubanos presos en Estados Unidos desde hace dieciséis años”, agregó el texto publicado en el sitio web de la Presidencia de Uruguay.
El Programa de Naciones Unidas para Refugiados (Acnur) se encargará de conseguir vivienda a los ex prisioneros llegados ayer, quienes podrán transitar “libremente” por Uruguay e incluso salir del país, de acuerdo a las declaraciones del mandatario uruguayo.
En declaraciones a la Televisión Nacional, Mujica adelantó que Uruguay no aceptó el planteo norteamericano de que los reclusos deberían permanecer al menos dos años en el país.