A poco menos de dos años de la promulgación –el 21 de julio de 2010– en el Congreso Nacional de la ley que permite el matrimonio entre personas del mismo sexo, ayer se conoció la primera demanda de divorcio en la provincia que tiene a dos mujeres como protagonistas. Según contó Mariana Herz, jueza del Tribunal Colegiado Nº 5 de la ciudad de Santa Fe, una de las integrantes de la pareja con residencia en Laguna Paiva realizó un pedido de divorcio contencioso que a partir de ahora seguirá los pasos tal cual lo marca el Código Civil para estas situaciones. Las mujeres se habían casado en marzo del año pasado y la acción judicial se materializó en el mes de abril de este año. Según se conoce públicamente, este sería el segundo pedido de divorcio del país tras la aprobación del matrimonio igualitario, ya que el primero de estas características tuvo como escenario la provincia de La Rioja el año pasado.
La magistrada explicó que hasta el momento lo que hay es una “primera presentación” realizada por una de las partes de la pareja. “Estamos hablando de un escrito de demanda únicamente o sea, no hay contestación todavía. Este matrimonio era de marzo del año pasado y la presentación es de abril de este año. Al ser un matrimonio igualitario se iguala con el matrimonio de personas heterosexuales de tal manera que las reglas que se aplican son exactamente las mismas a cualquier unión de estas características por lo que el Código Civil marca que al no tener un mínimo de tres años de estar casadas no pueden pedir su divorcio por mutuo consentimiento”, comentó.
“Lo que yo tengo en el expediente es un pedido de divorcio contencioso en donde una de las contrayentes pide el divorcio por un causal subjetivo. En este caso puntual no hay ningún planteo de inconstitucionalidad de la norma”, agregó.
La jueza de la capital provincial se encargó de dejar en claro que la actual ley considera que “el matrimonio entre personas del mismo sexo es exactamente igual que el de un matrimonio de personas de distinto sexo” por lo que los pasos legales que se aplican para el caso son exactamente los mismos sin ninguna diferencia.
“No me llama la atención particularmente este caso porque uno ha visto matrimonios de personas que han convivido días o semanas y que son de distinto sexo y bueno, se producen estas desavenencias. En muchas ocasiones vienen con muchísimos años de noviazgo anterior y demás y se casan y después se produce la ruptura del vínculo. En este caso no hay nada diferente solo que es entre dos mujeres y no entre una mujer y un hombre”, sostuvo.
“A partir de ahora todo va a depender de cómo avance la causa en función de cómo la impulsan las partes. El expediente está retirado desde el 16 de abril y no lo han vuelto a presentar con lo cual no sé si ha notificado a la otra parte con cédula o no y después va a depender de los plazos que se tome cada parte”, añadió.
Según comentó la funcionaria judicial “una de los contrayentes oscilaba los 25 años y la otra los 35, tienen diez años de diferencia exactamente una con respecto de la otra”. “Las dos eran mujeres que trabajaban. La presentación la hace una de ellas demandando a la otra y pidiendo el divorcio contencioso, que es la única opción que el Código Civil, según establece la ley, permite”, afirmó.
Cabe recordar que la República Argentina permite los matrimonios entre personas del mismo sexo desde el día el 15 de julio de 2010. De esta forma, el país se convirtió en el primero de América Latina en reconocer este derecho en todo su territorio nacional. Además, se convirtió en el décimo país en legalizar este tipo de unión a nivel mundial.
El debate sobre la legislación autorizando el matrimonio entre personas del mismo sexo comenzó en la Argentina a partir de la campaña nacional por la igualdad jurídica lanzada por la Federación Argentina de Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans, bajo la consigna “Los mismos derechos, con los mismos nombres”. Cabe destacar que en Argentina, se utilizó la expresión matrimonio igualitario para hacer referencia a la reforma del Código Civil, porque se entendía en la sociedad que se trataba de la búsqueda de la igualdad entre sus habitantes.