Protesta bajo agua. Un grupo de enfermeros autoconvocados que trabajan en dependencias de salud municipal se manifestaron este miércoles al mediodía en el Cemar, ubicado en San Luis y Moreno, reclamando el pase a planta permanente.
Los trabajadores de la salud remarcaron que «es en defensa de la salud pública y en contra de los contratos precarizados. Nos pagan 500 pesos la hora. No llegamos a fin de mes», aseguró una de las manifestantes.
Además, las enfermeras y enfermeros explicaron que son más de 100 los que trabajan en esas condiciones laborales desde el comienzo de la pandemia. «Somos más de 100 compañeros que tenemos monotributo, tanto en el Heca como en el Roque Sáenz Peña, en el Cemar, en el Carrasco y en todas las dependencias municipales. El monotributo tenemos entendido que es para prestatarios independientes. Nosotros somos empleados de la gente y trabajamos para ellos», detallaron a LT8.
Los enfermeros autoconvocados coincidieron que el reclamo es «a los tres estamentos del Estado».
Una de las enfermeras destacó que «durante la pandemia hemos resuelto toda clase de problemas, hasta problemas edilicios como pudimos». Y amplió: «Ahora, por ejemplo, el Roque Sáenz Peña pasó a ser un hospital de tercera complejidad, que antes no lo era. Es decir, nosotros ahí nos dedicamos a intubar pacientes, tenemos respiradores, nos estamos capacitando porque queremos brindar una mejor calidad de atención».
Y cerró: «Hasta ahora escuchamos promesas, pero desde que empezó la pandemia estamos en estas condiciones. Necesitamos trabajar seguros para poder cuidar a todos».
