Julián Murúa fue condenado por intentar matar a su pareja en septiembre de 2019 en el interior de la casa que compartían en Villa Gobernador Gálvez. El agresor apuñaló a la mujer cuando ésta le pidió que se preparara para ir al hospital donde estaba internada la hija de ambos. El acusado se negó y ante el reclamo de la víctima, la insultó y la atacó con un cuchillo, cuando intentó escapar le produjo un corte en el cuello. Este miércoles, en una audiencia de procedimiento abreviado, Murúa fue condenado por el hecho y deberá purgar una década tras las rejas.
Cerca de las 10 del 28 de septiembre de 2019 la víctima y Murúa estaban en la casa que compartían en Juan Domingo Perón y Juan José Paso de la vecina localidad. La mujer le dijo que debían ir al Hospital de Niños Zona Norte donde estaba internada la hija de ambos. El hombre se negó, ella le insistió y éste comenzó a insultarla.
Según la reconstrucción plasmada en la imputación del fiscal Luis Schiappa Pietra, el acusado le arrojó todos los objetos que tenía cerca. Luego agarró un cuchillo y tiró varias estocadas a la víctima , quien las logró esquivar. La mujer pudo empujar al agresor e intentó escapar, pero la agarró del cuello y le produjo un corte con el cuchillo.
La víctima gritó, entonces el agresor comenzó a darle golpes con sus puños en la espalda, cuando se cansó de pegarle salió de la casa y la dejo herida y encerrada. Como pudo, la víctima logró salir por una abertura trasera de la casa y se tomó un colectivo rumbo al hospital donde estaba internada su hija.
Cuando llegó, fue asistida por los médicos que le brindaron las primeras curaciones y la derivaron al Hospital Centenario ya que la herida recibida en el cuello necesitaba otro tipo de atención en una institución para adultos.
Se radicó la denuncia por el hecho y Murúa fue detenido en el domicilio que compartía con la víctima e imputado por la tentativa de femicidio.
Este miércoles el acusado admitió su responsabilidad en el hecho en una audiencia de procedimiento abreviado. El hombre consintió el acuerdo presentado por la Fiscalía y la Defensa ante el juez Ismael Manfrín, quien evaluó el caso y resolvió admitir y homologar el acuerdo. Tras lo cual dictó una condena de 10 años de prisión por tentativa de homicidio calificado por perpetrarse contra una persona con la que mantenía una relación de pareja y por cometerse en un contexto de violencia de género.