El gobierno de Santa Fe aclaró que esperará los anuncios nacionales sobre medidas para contener la segunda ola de pandemia por covid que, se espera, el presidente Alberto Fernández explique hacia el fin de semana. Pero ya dos ministros, al menos, adelantaron que las restricciones de circulación dispuestas desde el 23 de abril hasta el 2 de mayo se extenderán en el tiempo. Y agregaron es que se endurezcan si se mantiene el preocupante escenario epidemiológico en la provincia.
La vuelta a la libre circulación nocturna en vehículos particulares, hoy restringida entre las 21 y las 6, parece imposible. «En el mejor de los casos, mantendremos las restricciones que se resolvieron en la provincia el viernes de la semana pasada», es el mensaje que obtuvieron medios de la capital provincial por parte de los titulares de las carteras de Gestión y Trabajo, Marcos Corach y Juan Manuel Pusineri, respectivamente. En ese caso, el más suave, se dará una prórroga del decreto 386 que lleva la firma del gobernador Omar Perotti. El texto incluye la suspensión de los torneos deportivos –excepto los autorizados por Nación, y los entrenamientos–, de las reuniones familiares y las funciones en teatros y cines, entre otras actividades que no incluyeron, y por eso hubo reproches, las convocatorias religiosas.
El discurso oficial de la Casa Gris apunta a que las medidas restrictivas son un intento de contener los contagios en alza para que la potencial saturación del sistema sanitario –al límite tanto en el sector público como en el privado– no obligue a reducir las actividades productivas. Los ánimos no dan para otro golpe económico, es la percepción, aunque comerciantes y trabajadores de espectáculos y culturales reaccionaron ante los corsets que los afectan.
«Si no se puede controlar la circulación ni mitigar las aglomeraciones, no descartamos la posibilidad de tener que cerrar algunas actividades», advirtió el ministro Pusineri, sin especificar sectores, ante una consulta de la periodista Ivana Fux.
Otro tema que analizan desde el gobierno provincial es el refuerzo de los controles para garantizar que se cumplan las medidas, un punto flojo en esta y anteriores restricciones.
Escuelas, para lo último
Lo que mantienen los funcionarios santafesinos es la voluntad de dejar para lo último, si la situación sanitaria no da para más, el cierre de las escuelas, que hoy cumplen su función en modalidad dual, entre presencial y a distancia. Contra esta idea, los sindicatos docentes reclaman un parate en la apertura de las aulas, y esgrimen suba de contagios entre educadores, alumnos y personal auxiliar que ya, aseguran, obligó a aislar burbujas en varias localidades.
Los médicos, por medidas más duras
Los médicos agrupados en Amra seccional Santa Fe pidieron medidas más restrictivas para evitar un «desborde sanitario» por la alta ocupación de camas críticas.
«En representación de todos los profesionales de la salud de la provincia de Santa Fe hacemos saber a usted, y por su intermedio al Sr. Gobernador, que vemos con gran preocupación el inminente desborde del sistema sanitario, trabajadores desgastados sin el descanso correspondiente, la demorada contratación de trabajadores especializados para los nuevos espacios de atención de pacientes», es parte del texto de la carta que los profesionales le enviaron a la ministra de Salud santafesina, Sonia Martorano.
«Solicitamos (medidas) nuevas y más severas, no sólo para proteger y resguardar la vida y salud de los trabajadores de la salud, sino para garantizar la atención asistencial de toda la población», finaliza la interpelación con la firma de la secretaria General de la Seccional Santa Fe de Amra, Sandra Maiorana, que fue entregada en la Delegación de Salud de Rosario.
