Los almacenes y kioscos recibieron un aumento general de los precios de alrededor del 25% en los productos comestibles, tras la disparada del dólar. Las remarcaciones vienen de la mano de panificados, galletitas, dulces y elementos de limpieza. Desde el Centro Unión Almaceneros advierten que si bien la población no salió «a comprar de forma desmedida», a los clientes no les queda lugar para más ajustes.
«Uno está acostumbrado a situaciones bruscas, pero una devaluación te mueve mucho más la estantería», dijo Juan Milito, referente del sector en diálogo con El Ciudadano: «Hay empresas como Arcor que aumentaron hasta el 25% los precios de todos sus productos. Están aumentando desproporcionadamente los valores. La gente no resiste mucho más».
El ministerio de Economía aprobó un brusco aumento del 22% en el dólar oficial, elevando el precio de la divisa estadounidense a $350. Esto desencadenó un terremoto económico que impulsó una inercia inflacionaria: las principales empresas alimenticias aumentaron los precios de sus listas, poniendo en estado de alerta a los comerciantes de menor y mediana escala.
«Tenemos comerciantes que no saben cómo aplicar las listas de precios», se lamentó Milito, y sostuvo que los almaceneros no tienen una cabal idea de cómo defender estos aumentos en el mostrador frente a los clientes: «La gente no salió a comprar de forma desmedida e hizo bien. De otra forma, el quilombo con la plata habría sido mucho peor».
Según el dirigente almacenero, los formadores de precios, que son cerca de 20 empresas, vienen aumentando los precios por encima de cualquier elemento económico, al sólo efecto de incrementar sus ganancias: «Las PyMEs y los laburantes necesitan vender para afrontar los gastos, pero con estos precios, estos tipos se están pasando de rosca. No sé cuánto creen que puede seguir pagando un trabajador o un desocupado por un paquete de fideos».
Sobre llovido, mojado
En el mismo día en que los comercios reciben listas de precios infladas de los proveedores, el acuerdo que el gobierno nacional había firmado con las empresas petroleras venció este martes después de quince días desde el último aumento en las naftas. Este lunes por la tarde, los conductores se encontraron con un aumento que promedia el 7% entre las diferentes firmas.
Los incrementos en las bocas de expendio son el traslado de los que definieron las petroleras este lunes. Shell, Axion y Puma elevaron 25% sus precios mayoristas. Este incremento de las naftas se sumaría a la inercia alcista de los precios de la mayoría de los productos.
Cantado: tras la devaluación del 22% dispuesta por el Gobierno, despegan los combustibles 7%
El programa Precios Justos Combustibles fijaba subas de 4,5% mensuales que acordaron poner en vigencia alrededor del día 15. Las compañías ya habían adelantado el de agosto, al primer día. Desde el Ejecutivo nacional dijeron que negociaran un nuevo acuerdo con las petroleras.
«(Matías) Tombolini es un muy mal secretario de comercio. El gobierno nacional debe tomar medidas para controlar los precios de los alimentos», apuntó Milito.