Una vez más, la causa penal que investiga la desaparición de Paula Perassi llegó a la Cámara Penal. Esta vez la defensa cuestionó la prisión preventiva de Gabriel Strumia y Roxana Michl, los únicos dos condenados en una investigación llena de desmanejos y falta de perspectiva de género. Pero el camarista Carlos Carbone consideró que estaban dados los requisitos para que ambos siguieran el proceso tras las rejas y confirmó la resolución que dispuso la prisión preventiva. El resto de los acusados, muchos de ellos policías, el chofer de Strumia y la mujer sindicada como la persona que hizo una práctica abortiva a Paula por la fuerza que derivó en su muerte, terminaron absueltos.
Paula Perassi estaba embarazada de 6 semanas, mantenía una relación con Strumia quién la instó a terminar con el embarazo. Paula accedió pero se arrepintió. Para la teoría acusatoria fue engañada para un encuentro que derivó en una cita obligada con una mujer que le realizó un aborto que salió mal. Su cuerpo nunca apareció. La última vez que se la vio, salió de su casa el 18 de septiembre de 2011, dijo que iba a buscar una tarea para uno de sus hijos, nunca más volvió.
La causa tuvo un sinnúmeros de contratiempos, dónde se revictimizó a Paula una y otra vez. A juicio llegaron, recién en mayo de 2019, Strumia y su pareja Roxana Michl, Mirta Rusñisky y Antonio Díaz, por el delito de aborto sin consentimiento seguido de muerte y privación ilegítima de la libertad agravada. Para la acusación hubo una pata policial que utilizó el aparato estatal para desaparecer el cuerpo de Paula y borrar evidencia incriminante. Fueron llevados a juicio los empleados policiales que intervinieron en la investigación: Lorenzo Gabriel Godoy –actualmente involucrado en la investigación por la ejecución del barra de Newell´s Marcelo “Coto” Medrano –, Aldo Gómez y María Galtelli y los ex comisarios Jorge Krenz y Adolfo Daniel Puyol.
El resultado de ese debate fue la absolución de todos los acusados por el tribunal a cargo de Griselda Strólogo, Mariel Minetti y Álvaro Campos. Esta decisión fue apelada y en noviembre de 2019 se revocó parcialmente la sentencia. Fueron condenados solo por el delito de de privación ilegítima de la libertad coactiva por tratarse de una mujer embarazada, Strumia y Michl, a las penas de 17 y 7 años respectivamente.
Esta condena fue apelada y quedó en manos de los camaristas Viviana Alonso, José Luis Mascali y Gabriela Sansó quienes confirmaron la condena para Strumia y Michl, a está última le redujeron la sanción 6 meses y quedaron detenidos.
La defensa otra vez echó mano a un recurso de apelación para cuestionar el dictado de la prisión preventiva. En una audiencia presidida por el vocal Carlos Carbone, dijeron que no estaban cumplimentados los requisitos para el dictado de una cautelar y pidieron la libertad de ambos, subsidiariamente pidieron salidas transitorias para Michl.
Pero la fiscal María Eugenia Iribarren dijo que los requisitos de la prisión preventiva fueron analizados y plasmados en el fallo que expone la completa actitud de entorpecimiento probatorio de los imputados desde la desaparición de la víctima. Destacó que si bien hubo personas que fueron absueltas por el beneficio de la duda ello no significa que no hayan tenido participación.
Entiende que los imputados debieron tener ayuda para lograr un crimen sin cuerpo, hay una mujer desaparecida hace 10 años de quién no se sabe su destino, afirmó. Dijo que la defensa tenía los recursos para plantear una alternativa a la cautelar y no lo hizo y que no se acreditó que no se cumplan los protocolos necesarios para su alojamiento en un penal.
La querella, representada por los abogados Adrián Ruíz y José Ferrara, coincidieron con la fiscalía y dijeron que el hecho de que haya circunstancias especiales como por ejemplo la existencia de un crimen sin cuerpo, se tiene que tener en cuenta para toda petición de los acusados y resaltaron la falta de arrepentimiento y de colaboración para dar con Paula.
Alberto Perassi, el padre de Paula, señalo que no busca meter preso a nadie sino que quiere el cuerpo de su hija y tras escuchar a los acusados, el camarista Carlos Carbone resolvió confirmar la prisión preventiva dictada en contra del matrimonio Strumia Michl, por lo que ambos seguirán presos.