Una nota del portal especializado norteamericano Variety informó que las acciones bursátiles de cadenas de cine como Cinemark, Marcus Corporation e Imax cayeran, respectivamente, más del 21, 11 y 7,3 por ciento cada una. Se trata de alguna de las mismas cadenas que por el cierre y la pandemia ya despidieron a miles de empleados en todo el mundo.
De hecho, el duro golpe que la pandemia dio a las salas no pudo revertirse en Estados Unidos ni con el lanzamiento de la esperada Tenet y aunque Warner Bros argumenta que la medida es una solución temporal a una situación poco ortodoxa, parece ser una señal inequívoca de nuevos tiempos para la industria y sus formas de exhibición, ya que anula el criterio de darle a los cines los clásicos 90 días (tres meses, aunque depende mucho de cada país) de exclusividad para las películas.
Algunos de los títulos de Warner para el año próximo son verdaderos tanques que, de recuperarse la presencialidad en los cines podrían reconstruir en parte los ingresos en las boleterías. Se trata de Matrix 4, la remake del clásico Duna, la precuela de la serie Los Soprano, Godzilla vs. Kong y versiones de Tom & Jerry y del videojuego Mortal Kombat, entre algunas más.