El ministro de Seguridad de Santa Fe, Maximiliano Pullaro, anunciaba este jueves por la mañana la llegada de las fuerzas federales a Rosario para la misma jornada y con el fin de reforzar las “zonas calientes” del delito. El arribo está confirmado, pero hubo un cortocircuito con los tiempos. Luego de la conferencia de prensa del funcionario provincial, desde Nación aclararon que sólo algunos pocos gendarmes desembarcarán antes del feriado del 25 de Mayo. El resto –se mantiene el número de 300– pisarán territorio rosarino en dos tandas: el domingo, la más numerosa, y el 1º de junio, el remanente. El lunes, con el grueso de los efectivos ya instalados, hará su aparición la ministra del área de la Nación, Patricia Bullrich, para encabezar el anuncio oficial.
Fuentes del Ministerio de Seguridad santafesino confirmaron a El Ciudadano que por una “cuestión de logística de los 200 gendarmes que tendría que llegar esta tarde, solo llegarán unos pocos”. Fue después de que Pullaro comunicara a periodistas la versión original del arribo que cursó Nación.
En la conferencia de prensa de la mañana, Pullaro había explicado que 200 efectivos desembarcarían el mismo 24 de mayo y que el 1º de junio llegarían otros 100. Son unos 300 en total y se quedarán tres meses, afirmó el ministro. El número fue ratificado, el cronograma, modificado.
“Llegan para reforzar tareas operativas, es un convenio que realizó el gobierno provincial con el nacional desde 2016 y se ratificó en febrero de este año”, explicó el funcionario santafesino.
“Vienen para trabajar en las zonas más violentas que son la zona sur y suroeste”, siguió y relató que durante los primeros meses del año Rosario tuvo “un pico de violencia muy importante así como en el último mes de año pasado y se ha logrado detener en los últimos 20 días”.
“Este refuerzo nos permite planificar y ordenar en los lugares que van a trabajar operativamente en el mapa de delito en trabajo conjunto con el comando unificado estratégico”, se entusiasmó Pullaro al detallar los objetivos del nuevo desembarco federal en Rosario.
El responsable de la seguridad en la provincia aclaró que los gastos de la permanencia de las fuerzas federales corren por parte de la provincia, mientras que Nación se hará cargo de los viáticos. La estadía de tres meses, añadió, puede alargarse: “Veremos si necesitamos extender el refuerzo por un tiempo más”.
Desde 2016 hay unos 2 mil federales en total operando en toda la provincia con diferentes objetivos. “Estos 300 agentes llegan para hacer tareas de saturación en barrios conflictivos”, especificó Pullaro y reiteró: “El refuerzo es para las zonas puntualmente calientes, que son el sur y el suroeste”.