Los 27 gobernadores de Brasil se reunirán este miércoles para determinar los rumbos políticos del país luego de la crisis abierta por el presidente Jair Bolsonaro, que se opone a las medidas de restricciones de circulación y actividad económica por la pandemia de coronavirus.
«La reunión ocurre dada la gravedad de la situación del país y el comportamiento del presidente de la República», explicó el gobernador de San Pablo, Joao Doria.
Dos aliados claves de Bolsonaro, los gobernadores de Goiás, Rolando Caiado, y de Santa Catarina, Carlos Moisés Da Silva, de derecha, le han quitado el apoyo al presidente y su nueva embestida sobre el combate al coronavirus adoptada en los estados.
Bolsonaro, que en la noche de este martes en cadena nacional y este miércoles pidió el cese de las acciones contra el coronavirus para impedir una crisis económica, se enojó durante un diálogo que mantuvo con cuatro gobernadores del sudeste (San Pablo, Río de Janeiro, Espirito Santo y Minas Gerais).
Según las imágenes del encuentro, irritado y fuera de sí, Bolsonaro acusó a Doria y al de Río, Wilson Witzel, de buscar posicionarse para 2022.
Les recordó que ambos en 2018 se eligieron contra candidatos de izquierda o centro con un discurso de derecha apoyando a Bolsonaro como presidente.
El gobernador Doria es del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB) y comanda el estado con más muertos, 40 de los 46 informados oficialmente.
La situación de Bolsonaro en el gabinete se debilitó por lo menos en lo partidario, porque el gobernador de Goiás decidió romper con el mandatario.
Caiado pertenece al derechista Demócratas y es el padrino político del ministro de Salud, Luiz Mandetta, afiliado a esa fuerza.