Los humedales están «entre los ecosistemas que más contribuciones hacen a la sociedad», pero su «pérdida y degradación continúa año tras año», aseguran especialistas que destacan la necesidad de políticas que se dirijan a su conservación, en el Día de los Humedales, que por primera vez celebra las Naciones Unidas de manera internacional.
Para entender la relevancia de estos ecosistemas, distintos especialistas conversaron con Télam sobre sus funciones, el daño que presentan a escala global y local y las acciones necesarias para conservarlos.
«Actualmente se considera que los humedales están entre los ecosistemas que más contribuciones hacen a la sociedad», dijo a Télam Rubén Quintana, presidente de la Fundación Humedales e investigador en el Instituto de Investigación e Ingeniería Ambiental de la Universidad Nacional de San Martín (Unsam).
«Hablamos de humedales en plural porque son ecosistemas muy diversos e incluyen muchos tipos de paisajes. Lo que une a todos ellos es que el agua permanece en esos ecosistemas: los inunda o permanece con el suelo saturado durante un tiempo considerable», explicó a Télam el licenciado en Ciencias Ambientales por la Facultad de Agronomía de la Universidad de Buenos Aires y doctor en Ciencias Agrarias, Julián Monkes.
En cuanto a sus funciones características, la directora nacional de Gestión Ambiental del Agua y los Ecosistemas Acuáticos en el Ministerio de Ambiente de la Nación, Gabriela González Trilla, nombró el «amortiguamiento de las inundaciones y de depuración del agua», ser «hábitats para la fauna» y «la fijación de dióxido de Carbono (CO2), lo que los coloca en un lugar preponderante en relación con el cambio climático».
A sus palabras, Quintana agregó que «los humedales contribuyen con un 40% de todos los beneficios que recibimos».
Además, si bien los humedales abarcan, según datos que brinda la Fundación Humedales, aproximadamente el 6% de la superficie terrestre del planeta, «albergan aproximadamente el 12% de todas las especies».
Entre sus funciones principales, el presidente de la Fundación Humedales destacó «que muchos ecosistemas de humedal de agua dulce son fuente de agua para la gente, ya sea para consumo directo o para sus actividades».
«Estamos en una crisis hídrica en estos momentos en el país muy grave. Sobre todo en zonas donde nunca pensamos que íbamos a tener crisis como la cuenca del Plata. Somos un país que tiene un 70 por ciento de tierra seca: si en el 30% más húmedo tenemos crisis hídrica con estas bajantes extraordinarias, ¿qué puede ocurrir en las zonas más áridas?», se preguntó.
En la Argentina, los humedales ocupan alrededor del 21% del territorio y el país presenta 23 sitios Ramsar, es decir, aquellos humedales que se consideran «de importancia internacional en el marco de la Convención sobre los Humedales».
Para darle un anclaje local, Monkes describió algunas de las funciones de los humedales en Argentina.
«El Delta del Paraná una de las principales funciones que tiene es mitigar inundaciones. Como el suelo es muy poroso, esto hace que absorba el agua y quede reprimida, actuando como una especie de esponja», dijo.
Además, «las turberas de Tierra del Fuego proveen turba y la turba es una gran zona donde se absorbe dióxido de carbono y así mitiga el cambio climático», mientras que «los salares de altura tienen una gran cantidad de litio».
Sin embargo, en los último años existe «un importante avance en términos de conciencia por parte de la población respecto de la necesidad de contar con una política hacia los humedales, no como una cuestión abstracta, sino para defender los servicios ecosistémicos que brindan los humedales», destacó el viceministro de Ambiente de la Argentina, Sergio Federoviscky, en diálogo con Télam.
En este sentido y en relación con la reciente pérdida de estado parlamentario que sufrió el proyecto de ley de humedales por tercera vez, dijo que «es muy probable que progresivamente esa demanda de la sociedad vaya incorporándose cada vez más a la agenda política y finalmente tengamos una ley de humedales».
Actualmente, desde el Ministerio se realiza un inventario de humedales «que busca entender dónde están, de qué tipo son y cuáles son sus características», señaló González Trilla.
Por su parte, Julia Vélez, de 36 años e integrante de la Multisectorial Humedales, que nació en el 2020 en el auge de la visibilización de los incendios en el Delta del Paraná, expresó a Télam: «El pueblo quiere una ley: en estos últimos dos años hizo una demanda popular clara».
Este miércoles 2 de febrero la Multisectorial Humedales junto a la Asociación Bocacha Orellano realizan una concentración a las 17 en el puerto y paseo de pescadores «Bocacha Orellano», a orillas del arroyo Ludueña en la ciudad de Rosario.
«Como ciudadanos y ciudadanas no podemos legislar porque para eso están las personas que fueron votadas. En la medida en que esto no se haga, vamos a seguir generando conciencia con medidas pacíficas pero intensivas en los territorios por una ley de humedales», concluyó.