No es novedad que en Rosario siempre hubo talento. Nadie descubrirá que la ciudad (y la provincia) provee al país de grandes valores del básquet desde los inicios del deporte en Argentina.
Sin embargo, con el correr de los años se transformó en casi una utopía poder llegar a los seleccionados nacionales desde Rosario. Varios lo lograron, pero generalmente lo hicieron desde su reclutamiento en los clubes de Liga, donde entraron en la mirada de los entrenadores nacionales.
Las excepciones en décadas anteriores son los integrantes de aquella camada de Boccia, Fernández (Joaquín y Pablo), Garré, Pascual y Foradori, quienes fueron preseleccionados estando aún en elencos de la ciudad. Olvidos al margen, se hizo cuesta arriba llegar a los seleccionados sin integrar planteles de Liga. Quizás por no estar en el radar, tal vez por falta de talento o trabajo o, en algún caso, porque los entrenadores no agudizaron la mirada.
Lo cierto es que en 2007 la aparición de Cristian Cortés en Obras y de Ramiro Iglesias en Sionista los llevó a participar del Sudamericano de Venezuela e incluso Titi llegó al Mundial de Nueva Zelanda Sub 19. Esto le abrió una puerta a los rosarinos, que tuvieron otro enorme empujón con la llegada de Gabriel Tomassetti al cuerpo técnico de los seleccionados nacionales. Y allí empezó una seguidilla que debe ser orgullo. Por ejemplo, Cristian Scaramuzzino saltó desde Empleados de Comercio a Obras y a los seleccionados, donde jugó torneos internacionales, incluido un torneo Fiba Américas y los Odesur. O Jeremías Sandrini, quien desde Náutico estuvo en varias preselecciones, aunque no pudo quedar.
En Sub 15 se abrió una racha difícil de empardar. En 2009 Matías Bernardini llegó desde Temperley al seleccionado que fue campeón sudamericano en San Andrés (Colombia) y un año después fueron Matías Aristu (Provincial) y Andrés Ottolini (Calzada) los que quedaron en el plantel definitivo que también fue campeón, esta vez en San Juan de Pasto (Colombia). Y este año Sebastián Chianea (Sportsmen Unidos) logró idéntico objetivo en Asunción (Paraguay). Mientras que en estos días Jonathan Sacco, Ottolini y Aristu están jugando el Premundial Sub 16 en Cancún, Matías Bernardini y Matías Stival (Central) fueron designados ayer para el Sudamericano Sub 17 de Cúcuta. Son motivo de orgullo.