Publicaciones con insultos, contenido antisemita y difusión de noticias falsas registraron un «incremento» en Twitter, luego de que el viernes pasado se confirmara la noticia de que Elon Musk se convertía oficialmente en el dueño de la red social, según difundieron medios especializados.
El magnate sudafricano, que además dirige Tesla y SpaceX, completó la compra de Twitter por un valor total de 44.000 millones de dólares y se convirtió en su dueño. En ese rol, ya anunció que va a cambiar las políticas de moderación de contenido de la red social para apostar por «una mayor libertad de expresión».
También esbozó otras modificaciones, como el pago de una suscripción para conservar la tilde azul de verificación de una cuenta y la recuperación de la plataforma de videos cortos Vine. Si bien ningún anuncio aún fue oficializado ni detallado, Twitter experimentó ciertas alteraciones en su dinámica.
Como es habitual, los memes en tono sarcástico e irónico inundaron la red social, una movida a la que el propio Musk se subió -y esta vez- como cabeza de la compañía. Pero otro tipo de publicaciones comenzaron a surgir, originando preocupación en algunas organizaciones.
Por ejemplo, el jueves por la tarde, un insulto racista se mantuvo a un volumen bajo en Twitter, con menos de una docena de menciones cada cinco minutos en toda la plataforma, de acuerdo con la plataforma de análisis de redes Dataminr. Sin embargo, tras la difusión de la compra de Twitter, «hubo un aumento del 1.300%» de esa palabra dentro de la plataforma en varios idiomas, incluidos español, árabe y portugués, indicó el análisis citado por el sitio de noticias Bloomberg.
Por otra parte, las menciones de «ivermectina», el fármaco popular entre quienes buscan tratamientos alternativos para la covid-19 a pesar de la falta de investigaciones sólidas que lo respalden, también «se dispararon un 2.900%» en Twitter, alcanzando un máximo de 358 menciones cada cinco minutos, continuó el sitio.
La Liga Anti-Difamación (ADL, por sus siglas en inglés) contra los discursos de odio, identificó «un esfuerzo coordinado para difundir el contenido antisemita en Twitter, inspirándose explícitamente en la adquisición de la empresa por parte de Elon Musk», según publicó @ADL el viernes. en esa red social.
«En las últimas 24 horas (del viernes), más de 1.200 tuits y retuits han difundido memes antisemitas», denunció ADL.
Asimismo, el Instituto Network Contagion Research, que analiza el contenido de las redes sociales y se basa en Princeton, Estados Unidos, también se refirió al tema sobre contenido racista. Según esta institución,» se registró un aumento del 500% en el uso de la palabra ‘con N’ en Twitter», tras las 12 horas posteriores a la oficialización de Musk como dueño.
Musk aún no brindó comunicaciones oficiales sobre el tema, pero sí sigue usando Twitter para emitir declaraciones en lenguaje de broma: «Si tuviera un dólar por cada vez que alguien me pregunta si Trump va a volver a esta plataforma, ¡Twitter estaría acuñando dinero!».
