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Los productores de biodiésel dicen que se paró la actividad



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Por Arlen Buchara.- Los costos y la devaluación del peso, aseguran, incidieron de manera negativa en la fabricación del biocombustibles.

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Los pequeños y medianos productores de biodiésel de la región manifestaron públicamente su preocupación por la situación actual del sector y sostuvieron que tanto en la provincia como en todo el interior del país “hoy la producción está parada” debido a los costos de fabricación y a la devaluación del peso. En diálogo con El Ciudadano, Juan Facciano, director de la empresa elaboradora de biodiésel El Albardón, de Puerto General San Martín, aseguró que la situación es crítica desde hace un año y medio, pero que se vio intensificada luego de que la Secretaría de Comercio Interior diera a conocer, el miércoles de esta semana, precios de venta “muy por debajo de los costos con que se trabajó correspondientes a octubre y noviembre de 2013”.

En la provincia de Santa Fe son seis las empresas elaboradoras de biodiésel, la mayoría de ellas ubicadas en el Gran Rosario: Arroyo Seco, Alvear, Roldán y Puerto General San Martín; las otras dos se encuentran en las localidades de Piamonte (oeste provincial) y Calchaquí (en el norte). Cada fábrica tiene, en forma directa, un promedio de entre 30 y 40 empleados, a los que se suman los camioneros, las aceiteras asociadas, la industria metalmecánica, ferreterías, logística, entre otros recursos. “En algunos pueblos se trata de la única industria que tienen”, manifestó Facciano.

Desde mediados de 2012 para el mercado interno el sector del biodiésel tiene un precio que establece la Unidad Ejecutiva Interdisciplinaria de Monitoreo, dependiente de la Secretaría de Comercio Interior de la Nación. “Si bien el sector desde un primer momento tuvo inconvenientes por la falta de actualización y publicación de los precios, esta situación se vio agravada desde agosto de 2013 por la variación en el tipo de cambio, ya que nuestras materias primas son en dólares. Desde septiembre no se publicaban las actualizaciones de los precios, lo que llevó a que los costos de producción fueran muy altos. Esto generó una situación insostenible para pequeños y medianos productores, tanto por la devaluación de la moneda como por el aumento de los insumos, con la soja y el metanol como los más altos”, dijo el empresario.

Promesa no cumplida

Los representantes de las pymes de biodiésel de la región fueron recibidos dos semanas atrás por el secretario de Comercio Interior Augusto Costa, y le manifestaron la problemática creciente: “En la reunión nos dijo que se iba a resolver la situación mediante la actualización de precios. Salimos del encuentro con un optimismo moderado, pensando que habíamos encontrado un interlocutor que nos escuchó, que reconoció el problema y tomó el compromiso personal de resolverlo. Pero finalmente se publicaron los precios de octubre y noviembre y están muy por debajo de los costos que nosotros ya invertimos”.

Facciano agregó que hace unas semanas las empresas firmaron el acuerdo de compromiso de abastecimiento para todo el 2014. “Nos encontramos con que el gobierno publica los precios correspondientes a meses que nosotros ya entregamos, pero a valores que no sólo están por debajo de los costos que tuvimos sino que tampoco reconocen o contemplan los costos financieros y de devaluación que sufrimos en los últimos cuatro meses. Toda esta situación genera el quiebre de estas empresas”, argumentó.

Según el empresario, con materias primas que se cobran en precio dólar e insumos también en esa moneda, al día de hoy las empresas de Santa Fe y todas las pequeñas y medianas del interior del país no están funcionando.

“El 100 por ciento de la producción se volcaba al mercado local, algunas incluso están iniciando procedimientos preventivos de crisis. En total son 35 plantas en todo el país que están paradas e involucran a 2.500 puestos de trabajo”, detalló Facciano con preocupación.

A esto se suma la inflación en los costos de materias primas que sufrió el sector durante 2013, con un aumento de más de un 40 por ciento del aceite, 51 por ciento el metanol, 35 por ciento el metilato y el 24 por ciento la mano de obra, mientras que la variación que tuvo el biodiésel en el precio de venta se redujo 1 por ciento.

Además, Facciano sostuvo que todas las empresas mensualmente deben presentar los costos a la Secretaría de Comercio Interior: “En eso pesa todo el rigor, pero ellos no publican las actualizaciones desde hace meses. Todos los insumos los compro a valor de mercado, pero el biodiésel sólo lo puedo vender al precio que dicta el gobierno nacional”.

Finalmente, el director del establecimiento El Albardón concluyó: “La solución es lo que proponemos desde hace un año y medio: que se publiquen en tiempo y forma los precios acordes. En estas condiciones no podemos seguir trabajando”.

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