El seleccionado argentino de rugby, Los Pumas, volvió a la victoria tras derrotar esta tarde en el estadio Bicentenario de San Juan a Georgia 29-18 en el marco de un test match que le sirvió para cerrar la ventana de junio. Con este resultado, los dirigidos por Santiago Phelan se recuperaron de las dos derrotas consecutivas que sufrieron frente a la poderosa Inglaterra.
Sin mucho brillo, lograron quebrar la modesta formación euroasiática con un try de Tomás Cubelli y 8 penales de Martín Bustos Moyano. Al seleccionado argentino no le sobró nada ante un adversario sobre el que históricamente ha marcado supremacía y que tiene un juego muy frontal.
Argentina continúa de esta manera su preparación con vistas a su participación en el Rugby Championship que se disputará a partir del 17 de agosto próximo, en el que los Pumas debutarán ante Sudáfrica como visitante.
Los Pumas estuvieron lejos de su nivel pese a que estaban obligado a cambiar la imagen que habían dejado frente a Inglaterra en sus dos primeras presentaciones. A pesar de las modificaciones introducidas por Phelan para este compromiso, Argentina lució atada y por momentos con escasos recursos técnicos para llegar al line.
Pese a que logró ponerse rápidamente en ventaja con un penal Bustos Moyano terminó el primer tiempo perdiendo 12-9. El equipo nacional volvió a tener problemas en el scrum y se mostró indisciplinado en defensa lo que lo llevó a cometer 7 penales en 40 minutos.
Para colmo de males Bustos Moyano no estuvo certero en la patada a los postes y falló dos envíos de cinco.
Los Pumas no lograron nunca generar un juego dinámico al cabo de un juego que en el balance final resultó aburrido y que sumó poco a su preparación.
En la semana Phelan había planteado la necesidad de que el equipo se soltara pero una vez mas faltó a la cita y no estuvo a la altura de las circunstancias ya que careció -fundamentalmente- de actitud.