Tras un paro de 24 horas –entre las 18 del último sábado y las 18 de ayer– decidido por los peones de taxis luego de un hecho de violencia contra un trabajador del volante el último viernes –quien sigue peleando por su vida en el Hospital de Emergencias Clemente Álvarez– representantes del Sindicato de Peones de Taxis, junto a su titular, Horacio Boix, se reunieron con el ministro de Seguridad provincial, Maximiliano Pullaro, y funcionarios municipales para trabajar en aspectos preventivos “que ayuden a los taxistas a trabajar más seguros”.
Allí se decidió crear una mesa de trabajo donde las partes se reunirán periódicamente y evaluarán cómo están funcionando los patrullajes y los controles policiales, además de una promesa de reforzarlos, principalmente en las zonas más “calientes”.
Otra discusión que sobrevuela y sigue dando vueltas es la posibilidad de sacar el efectivo de arriba de las unidades para evitar la “tentación” de los asaltos, algo no exento de polémica.
El ministro Pullaro destacó a El Ciudadano que, a su juicio, se desarrolló “una reunión de trabajo muy importante” en cuanto a sus resultados. “Nos pusimos de acuerdo en armar una mesa que se reunirá cada quince o veinte días para monitorear e intercambiar opiniones sobre cómo se están llevando adelante las políticas preventivas de seguridad”, indicó.
“Paradójicamente –sostuvo el ministro– este hecho se da en el momento que menos denuncias teníamos de asaltos o agresiones a taxistas, y mucho de eso tiene que ver con las políticas preventivas que estamos llevando adelante. Hay muchos más patrullajes y eso es visible y así seguiremos trabajando las 24 horas porque hay plan diseñado con ese objetivo”.
Efectivo sí o no
Al ser consultado sobre si consideraba como una solución el sacar el efectivo de los taxis a través del uso de una tarjeta prepaga, Pullaro respondió que la responsabilidad de su área se circunscribía a “brindar seguridad”. “Si los taxis llevan efectivo o no a bordo de las unidades es una decisión que se deberá discutir en el Concejo Municipal”, añadió.
Por su parte, el secretario general del gremio de taxistas reconoció en su evaluación que fue “una buena reunión” y que se fueron con el compromiso de reforzar la presencia policial en las calles y principalmente en las zonas más peligrosas.
“Estamos ante una cuestión realmente muy complicada, porque lo que le pasó a este compañero le podría haber pasado a cualquiera. Fue al voleo, o sea que en realidad que haya mayor patrullaje va a ayudar a que todos los que vivimos en esta ciudad estemos mejor, no sólo a nosotros”, siguió.
“También quedamos en tener reuniones periódicas con el gobierno para evaluar cómo se están llevando adelante los operativos. Hay que tener en cuenta que este es un gobierno nuevo y tampoco se le puede pedir milagros. Lo que notamos es que hay buena predisposición y esperamos que la misma se mantenga en el tiempo”, continuó.
A la hora de analizar la posibilidad de sacar el efectivo de las unidades, Boix evaluó que puede ser una forma de desalentar los robos, “pero tampoco es que sea la solución total”.
“Es cierto que en general buscan efectivo porque les sirve para comprar droga, pero también pueden robarte las zapatillas o los celulares. Hay un sector de los titulares que no está muy de acuerdo con sacar la plata. Igualmente, es un tema que tiene que tratarse en el Concejo y allí tienen que decidir cómo aplicarlo”, remarcó.
Justamente desde las cámaras de titulares vienen siendo renuentes a la eliminación del uso del efectivo. En la Asociación de Taxistas Independientes (Atti) suelen recordar a quien quiera oírlos que la solución no pasa por sacar la plata. “La inseguridad es un tema que afecta a toda la sociedad. Si no tendríamos que pensar en ponerle un posnet a la señora que va a hacer las compras”, exageró Mario Cesca, su titular.
El propio gobernador de la provincia, Miguel Lifschitz, dijo al portal Rosarioplus que “hay que animarse a tomar” esa medida. “Yo espero que haya consenso entre los taxistas, que siempre tienen distintas opiniones”, expresó.
Sobre la medida de fuerza realizada el último fin de semana, el titular de la Casa Gris, dijo entender el dolor de los taxistas para luego recordar que antes del paro ya había prevista una reunión entre las partes para discutir la cuestión de la seguridad.
Pronóstico reservado
El hecho que provocó la medida de fuerza es el ataque al taxista Marcelo Viva, de 52 años, quien resultó gravemente herido a balazos en un intento de asalto. Internado en terapia intensiva en el Heca, el gremialista Boix dijo que su estado era ayer estable pero seguía delicado.
“El tema es que hay algunos problemas con la cuestión de la presión que se le complicaron por la medicación que está recibiendo. Hay que rezar y esperar para ver cómo evoluciona y esperemos que sea todo para bien”, respondió.
El robo ocurrió el viernes por la noche, a las 22.20, en la zona sur de la ciudad, cuando Viva llevó a un pasajero hasta Juan Canals y Alvear. Al descender para ayudarlo a bajar un equipaje del baúl, el chofer fue atacado por dos personas que se aproximaron en una moto para exigirle la recaudación. Ante la negativa del trabajador, el delincuente que viajaba como acompañante le efectuó cuatro disparos en el tórax, el abdomen y ambos brazos, y luego se dio a la fuga llevándose el dinero.
Herido, logró subir a su auto y dirigirse hasta una estación de servicio cercana, ubicada en Ovidio Lagos al 3900, donde pidió ayuda y fue trasladado al Hospital de Emergencias Clemente Álvarez por personal policial que se encontraba en la zona. Allí se le diagnosticó heridas de armas de fuego múltiples, en abdomen, con perforación de intestino delgado, colon y diafragma, por lo cual hasta el cierre de esta edición se encontraba internado en terapia intensiva, con asistencia respiratoria y pronóstico reservado.