Jeremías Ledesma (7). Nada que hacer en el gol de penal de Cardozo. Metió una tremenda atajada, a puro reflejo, ante un cabezazo a quemarropa de Bareiro.
Gonzalo Bettini (4,5). Perdió un mano a mano con Martínez que podría haber terminado en gol.
Matías Caruzzo (6). Arrancó con una pifia en un despeje. Pero después mostró lo solidez de siempre. Se impuso en los duelos mano a mano.
Marcelo Ortiz (4). Cometió un ingenuo y torpe penal sobre Martínez en el inicio del complemento. Flojo.
Nahuel Molina (5,5). Pasó poco al ataque y le faltó mejor resolución, pero en defensa cumplió. Aportó un cierre que evitó un gol.
Joaquín Pereyra (6,5). Más voluntarioso que otras veces. A ese atributo le sumó el gol del 1-0.
Fabián Rinaudo (6). Mucho despliegue en los retrocesos y a la hora de la recuperación. Algo desprolijo en la distribución.
Néstor Ortigoza (4). Pobre desempeño. Lento en sus desplazamientos, con o sin pelota, nunca pesó. Tampoco mostró su habitual eficacia en las entregas.
Leonardo Gil (4,5). Se lo notó incómodo sobre la derecha. Y no estuvo preciso en la ejecución de la pelota detenida, algo que le viene pasando seguido últimamente.
Maximiliano Lovera (7). Esta vez le tocó jugar recostado por izquierda. Y fue tan desequilibrante como lo venía siendo por el centro. Desde su gambeta en velocidad, Central insinuó. Y le dio buena asistencia a Riaño para el 2 a 1.
Germán Herrera (5). Como de costumbre, las peleó todas. Ganó y perdió. Pero no le quedó ninguna en situación de gol. Salió en el inicio del complemento, bajo una cortina de aplausos como reconocimiento al fin de su carrera.
Luciano Recalde (5). Dubitativo. No siempre resolvió bien.
Claudio Riaño (6,5). No definió de la mejor manera, pero se reencontró con el gol. Es cierto que el arquero Silva estuvo poco feliz en el mano a mano, pero Riaño convirtió. Y el delantero vive del gol.
Washington Camacho (-). Inexplicable. Ingresó para aportar su experiencia en el mediocampo. Cometió dos faltas en cinco minutos y se fue expulsado. Si había dudas sobre su continuidad, el uruguayo hizo méritos para que lo dejen ir.