En febrero está previsto que la provincia inicie formalmente las discusiones paritarias con los distintos gremios estatales. El secretario general del Sindicato Argentino de Docentes Privados (Sadop), Martín Lucero dialogó con El Ciudadano, y pidió que el gobierno de Omar Perotti ofrezca alguna alternativa a la cláusula gatillo (que se activa cuando la inflación supera lo acordado como aumento paritario ya convenido). El gremialista dijo: “Para nosotros es el mejor mecanismo porque es el más equitativo al momento de equiparar el salario con los índices inflacionarios. No es posible que el gobierno no proponga ningún mecanismo de actualización. Implica el congelamiento de los salarios. No tiene sentido discutir con los salarios congelados”.
Los canales
Detrás del reclamo de Lucero –ya conocido a través de una comunicación enviada la semana pasada al gobierno– están las formas de diálogo con el Ejecutivo provincial. “Queremos llamar la atención sobre los comentarios de los funcionarios que andan hablando en los medios de comunicación por la cláusula gatillo y no esperan el momento indicado para hablar de estos temas, que es la paritaria”, explicó.
El sindicalista opinó que “si no va a haber cláusula gatillo debe haber algún mecanismo de actualización salarial que proponga el gobierno”. También agregó: “La inflación va a subir y los salarios no. Entonces el déficit de las cuentas públicas lo van a terminar pagando los trabajadores y trabajadoras con sus sueldos”.
El sindicalista no descartó que de no obtener respuestas desde la provincia evalúen entrar en un “conflicto prolongado”.
El antecedente
La semana pasada desde Sadop Rosario sacaron un comunicado en contra la decisión del gobierno provincial de aplicar una suba del 4,1% como adelanto de la política salarial 2020. Consideraron que la suma es cumplimiento de lo acordado como cláusula gatillo firmada en la paritaria de marzo 2019.
Siempre según esa comunicación, el 4,1% corresponde a la cláusula gatillo del mes de noviembre. “La enorme diferencia entre aceptar uno u otro concepto en el pago, es que la cláusula gatillo se considera un incremento salarial que se suma al básico salarial”, explicaron desde Sadop y consideraron que el argumento fiscal que expone el gobierno provincial para no aplicar la cláusula gatillo, va en detrimento de los asalariados.
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