El empresario procesado por narco Luis Alberto Paz se entusiasmó ante la posibilidad de una reunión con la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, en 2018. Fue dos meses y medio antes de ser detenido. El dato se desprende de la investigación de la Fiscalía Federal de Santa Fe sobre el patrimonio que le atribuyen al ex mánager de boxeo, que consta de ocho propiedades y 18 vehículos. Paz aparece como dueño de un departamento céntrico cuyo inquilino, un hombre vinculado con una asociación gay rosarina, le aseguró que había mantenido una velada nocturna con la funcionaria nacional y una subordinada que trabajaba en la dirección de diversidad de su cartera. El interés de Paz quedó registrado en escuchas telefónicas: “Escuchame una cosa, nene, yo tengo que juntarme con esa señora”, fue la entusiasmada réplica de Paz, hoy preso en el penal de Rawson.
En marzo de 2019, el edificio Click, de Oroño 480, saltó a la crónica policial: allí fue detenido por Interpol el rosarino Luciano Eugenio Conocchiari cuando salía del departamento de un familiar, en el tercer piso. El desarrollador de software de 42 años tenía un pedido de captura de internacional por la sospecha de que había intentado ingresar una tonelada de cocaína a Francia en su yate. Otro de los departamentos del Click aparece ahora mencionado en la causa narco que tiene bajo la lupa el acervo patrimonial de Paz. Según consta en el expediente que instruye el fiscal federal Walter Rodríguez, en septiembre de 2018, esta vez en el piso 10, hubo una reunión que llamó la atención del ex mánager del cuadrilátero.
En los considerandos del pedido de elevación a juicio contra Paz se expone que el piso 10 del edificio de Oroño 480 es alquilado por Marcos C., integrante de una asociación dedicada a la inclusión de hombres gay. La titular de la propiedad es la ex esposa de Paz, pero la investigación federal apunta a que es el propio empresario quien percibe el alquiler y la mujer, uno de sus testaferros. El 27 de septiembre del año pasado, Marcos llamó a Paz. La conversación quedó registrada.
—¿A que no sabes quién viene a la Asociación, que llega ahora, a la noche?
—¿Quién?
—Patricia Bullrich y Mara Pérez Reynoso, que vienen para una reunión con nosotros por el tema de la Asociación, yo no lo puedo creer esto.
— ¡No me digás!
Los dos interlocutores no salían de su asombro y el diálogo culminó con Marcos prometiendo detalles del encuentro. Reynoso es una funcionaria trans del área de Diversidad del Ministerio de Seguridad. También, militante de Cambiemos.
El padre del asesinado Fantasma llamó a su inquilino al día siguiente.
—Te preguntaba si fue ayer la Bullrich.
—Luis, fui, fue ayer la Bullrich y la sobrina a comer a mi casa.
—¡No me digas!
—Te lo juro. Se fueron a las tres y media de la mañana.
—¡Qué bien! ¿Y te dio algo, alguna tarjeta, te dio?
—¡Tengo la tarjeta de todo!
Paz estaba por esos días atribulado. En abril, un megaoperativo en el que varios de sus allegados terminaron detenidos lo rozó y su nombre volvió a estar en el ojo de la tormenta.
Marcos le contó a Paz que Bullrich llegó con su custodia, su chofer y su sobrina al departamento de Oroño. Remató esa conversación con una esperanza: “Si la pegaba con la Bullrich, ya se arreglaba por un tiempo para no andar renegando”.
Paz insistió con su inquilino otra vez el 29 de septiembre. Quería detalles de la cena en su departamento. “Tenés que contarme un montón de cosas”, lo apuró a Marcos.
El 6 de octubre, 35 días antes de ser detenido, Paz volvió a mencionar el tema, entre otros, en un nuevo llamado al tesorero de la asociación. Lo obsesionaba la reunión en Oroño 480 .
—Escuchame una cosa, después me tenés que explicar los otros días cuando estuvo en el departamento mío Patricia, ¿fue a cenar con vos?
Marcos respondió en forma afirmativa.
—Pero ¿vos tenés ya la relación para juntarnos?
—Totalmente.
Marcos le dijo al padre del Fantasma Paz que lo habían pasado a buscar, junto a otros dos miembros de la Asociación, en una camioneta del Ministerio de Seguridad. Los investigadores hacen una salvedad: «Los dichos del inquilino de bulevar Oroño pueden ser expresiones grandilocuentes que posiblemente se encuentren afianzadas en el intelecto de Marcos para aparentar vínculos que en realidad pudieron ser originados por encuentros fortuitos”.
Paz no pensaba lo mismo, como demuestra una nueva comunicación:
—Escuchame una cosa, nene, yo tengo que juntarme con esa señora.
—Bueno, listo, es cuestión que lo charlemos, tenemos el contacto directo con ella.
Luis Paz, detenido el 10 de diciembre de 2018, está procesado por lavado de activos y como organizador de una banda narco. En el requerimiento de elevación a juicio, la Fiscalía dio por probado que acumuló, en forma directa o mediante testaferros identificados, un patrimonio de valor incompatible con los ingresos declarados.
