El presidente Mauricio Macri anunció ayer la quita total de retenciones a exportaciones de trigo, maíz, sorgo, girasol, carne y pesca, y una baja de 5 puntos porcentuales para las de soja, y le exigió a los productores que “no evadan impuestos”, al visitar un campo en la localidad bonaerense de Pergamino.
Con estas medidas, el gobierno espera que los productores liquiden lo más rápido posible los granos que mantienen retenidos, y esto permita reforzar las reservas del Banco Central.
“A producir más trigo, más maíz, más carne, todo tiene cero retenciones. Fuerza Argentina”, dijo el presidente, quien también solicitó a los productores que no lo obliguen a aplicar la ley por encontrar que se están “evadiendo impuestos”.
El jefe del Estado recordó que hay un compromiso que también deben cumplir los productores y acopiadores: pagar los impuestos porque ahora –según afirmó– el gobierno los va a “administrar bien y no hay ninguna excusa”.
“Si hay ganancias, hay que pagar con alegría el impuesto a las Ganancias. No querría tener que aplicar la ley porque encuentro que están evadiendo. Voy a ser implacable aplicando la ley a aquellos que no la cumplen”, sostuvo Macri ante la atenta mirada de los agricultores.
El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, aseguró que “la Argentina dejó de exportar por lo que hoy no tiene incidencia lo que se anuncia en el precio (interno) de la carne” y precisó que están dialogando con los supermercados porque “hubo expectativas desmedidas” sobre lo que iba a pasar.
Macri llegó a Pergamino, donde lo esperaban unos 200 productores agropecuarios, en compañía de la gobernadora bonaerense, María Eugenia Vidal, y algunos de sus ministros, como Buryaile y el jefe de Interior, Rogelio Frigerio; y el presidente de la Cámara de diputados, Emilio Monzó.
“Hoy (por ayer), cuando aterrice en Buenos Aires voy a firmar el decreto por el cual la Argentina pasa a tener retención cero a las exportaciones regionales”, dijo el jefe del Estado, al anunciar que “llegó el día” que el pidió a los productores que esperaran durante la campaña.
Macri dijo que a los productores les pidió “sistemáticamente que aguantasen” cuando recorría el país en la campaña electoral porque le marcaban que “no la estaban pasando bien” debido a que la situación de las economías regionales estaba “muy crítica”.
El presidente agregó que no se pueden plantear más las políticas en términos de “el campo o la industria” o “el campo o el país”, dado que desde ahora es “el campo junto a la industria por el país”, dado que sin el aporte del sector rural la Argentina “no sale adelante”.
Macri pidió a los ruralistas que la quita de retenciones se convierta en una mayor generación de trabajos registrados porque esa es la única manera de terminar con la pobreza, que es uno de los tres ejes de su gestión junto a la lucha contra el narcotráfico y una mayor transparencia institucional.
Según el mandatario, durante las dos gestiones de Cristina Kirchner “por falta de diálogo y criterio se ha puesto en riesgo los empleos que se habían creado” y remarcó que ahora es el momento de “crecer y generar oportunidades para los que aún están al margen y para mejorarles las condiciones a los que sí tienen trabajo”.
Obras sin corrupción
Macri reconoció que su administración tiene la “enorme responsabilidad” que consiste en construir la infraestructura necesaria como rutas, puertos, hidrovías y ferrocarriles para movilizar la producción y abaratar costos de logística, para descomprimir las presiones sobre los precios internos.
“Vamos a poner en marcha el mayor plan de infraestructura de la historia sin corrupción. Las obras van a valer lo que valen”, se comprometió y solicitó a los productores e inversores a “lograr que cada vez exportemos menos cereales y más productos con valor agregado”.
“Tenemos que dejar de ser el granero del mundo para ser el supermercado del mundo”, expresó Macri, y al ratificar que aplicará la ley a los que no la cumplan, sostuvo que hay que “alejarse del atajo, de la mentira. Hay que recuperar el valor de la palabra, siendo preciso, hablando poco”.
Y aclaró que el objetivo de su gobierno es estar todos los días un poco mejor sabiendo que nada va a cambiar de un día para el otro ni con soluciones milagrosas ni con efectos de la magia, y confió en el “enorme espíritu emprendedor en este maravilloso país”.
Piden medidas complementarias para evitar subas en los precios
El ministro de la Producción de Santa Fe, Luis Contigiani, consideró que la eliminación de las retenciones debe ser acompañada “con otras medidas complementarias” porque de lo contrario el costo “lo va a pagar el consumidor”.
Habló de desequilibrios que se darían en los sectores avícola, porcino y ganadero por el aumento del precio del maíz, uno de los cultivos beneficiados por la eliminación de retenciones. “Solamente esto no alcanza, tendríamos que tener un conjunto de otras medidas para evitar desequilibrios”, dijo a radio Universidad. “Si eliminamos retención y no ponemos encajes mediante estudios de competitividad de todas las cadenas agroalimentarias que nos permitan distribuir ganancias de un eslabón hacia otro, vamos a tener serios desequilibrios y no vamos a poder controlar los efectos negativos sobre los precios de consumo. Si elimino retenciones y beneficio al sector primario, tengo también que poner en caja la intermediación de las grandes bocas de expendio porque si no todo esto lo va a pagar el consumidor”, evaluó.
Un anuncio muy esperado que generó repercusiones positivas
Referentes del sector agropecuario elogiaron ayer la quita de retenciones a los granos y coincidieron en que permitirá aumentar 50% la producción de alimentos y crear 1,3 millón de empleos.
La Sociedad Rural señaló que “se cierra un capítulo, termina una etapa de confrontación y arranca un camino de construcción, de cooperación entre el campo y el sector público”. Y agregó: “Estimamos que esta relación virtuosa llevará a establecer una estrategia apropiada para que el país pueda aumentar en un 50% su producción de alimentos en los próximos 5 años y generar más de 1,3 millón de puestos de trabajo”.
Por su parte, la Bolsa de Cereales expresó su beneplácito por la eliminación de los Derechos de Exportación a los productos de origen agropecuario e ictícola. “El desafío de hacer frente al compromiso que el señor presidente reclamó al sector, en cuanto a su aporte al crecimiento del país, requería como medida indispensable, la remoción de este impuesto, uno de los más distorsivos de nuestro sistema tributario”, añadió.
Mientras que Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) asumió que “quedan en este nuevo horizonte grandes tareas pendientes para esta República devastada por políticas equivocadas, dañinas y prejuiciosas hacia el campo llevadas a cabo en estos últimos 12 años”.
Para el CEO del grupo Los Grobo, el empresario Gustavo Grobocopatel, el anuncio de Macri “revive el entusiasmo por volver a producir” y afirmó que los chacareros van a vender rápidamente la soja. Subrayó que el impacto de la noticia es más “emotivo” que económico y evaluó: “Es un anuncio sumamente importante, que tiende a corregir determinados problemas en el sector”.
A su vez, el presidente de Federación Agraria Argentina, Omar Príncipe, precisó que las medidas no son una “solución” definitiva para el campo y que no acaban con el problema “de los pequeños y medianos productores”.
“Hay que trabajar mucho en la cadena de valor porque los pequeños productores pueden seguir con los mismos problemas”, sostuvo Príncipe.
La Federación Gremial del Personal de la Industria de la Carne y sus Derivados, y la Unión de Recibidores de Granos y Afines de la República Argentina (Urgara), apoyaron también el decreto. Urgara reconoció el cumplimiento por parte de Macri de las promesas de campaña. El secretario general de la Uatre, el gremio rural, y presidente del Partido Fe, Gerónimo Venegas, manifestó que las medidas van “a permitir que el campo deje de ser el combustible y pase a ser el motor de la economía, generando muchas fuentes de trabajo”.
Finalmente, la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (Came) destacó la decisión de eliminar las retenciones a las economías regionales.