En un festejo del Bicentenario de la Independencia que se destacó por su sobriedad y se diferenció más nutridas anteriores celebraciones populares, el presidente Mauricio Macri aprovechó su discurso durante el acto en la histórica Casa de Tucumán para defender las políticas económicas aplicadas en sus siete meses de gestión y afirmó: “Vamos por el camino correcto”.
Macri habló de la “pesada herencia”: lamentó haber recibido “un país y un Estado realmente castigado por la mentira y la corrupción”, pero aseguró que va “en la dirección hacia un futuro mejor”.
En su discurso en la puerta de la Casa de Tucumán, donde hace dos siglos los representantes de las provincias firmaron la Declaración de la Independencia, el mandatario defendió “el camino” iniciado por su gobierno y envió mensajes a todos los sectores de la sociedad, entre los que se destacó una advertencia a los gremios.
El jefe del Estado resaltó la “responsabilidad” que conlleva la independencia y remarcó: “No le podemos echar la culpa a nadie de lo que nos suceda, porque somos los dueños de nuestros destinos”.
Tras participar del tedeum en la catedral y firmar un acta con gobernadores, instó a la población a “no tener miedo, no escuchar a aquellos que se han enfermado con el poder”.
El líder del PRO resaltó: “La verdad es dura, desafía, porque hay que reconocer lo que pasa y resolverlo”. Ante gobernadores, funcionarios nacionales y representantes extranjeros, el jefe del Estado insistió en que tuvo que tomar “decisiones duras y que siguen doliendo”.
“Todas las transiciones son difíciles (…) Sé que a muchos argentinos les está costando. Pero si había una alternativa, la hubiese tomado, pero no la había”, afirmó el mandatario.
Aseguró que se logró bajar la inflación y que comenzaron a poner en marcha el plan de infraestructura “más importante de la historia”. Pero además, defendió la política tarifaria y abogó por “consumir la menor cantidad de energía posible” (ver página 8).
“A nuestros queridos trabajadores, la cultura del trabajo, del esfuerzo, que te lleva al camino de la dignidad. Pero tenemos que alejarnos de lo que pasó en los últimos tiempos, en que creció el ausentismo, las licencias, las jornadas horarias reducidas”, lanzó. Y agregó: “Cada vez que un gremio consigue una jornada reducida, el resto de los argentinos lo estamos asumiendo como parte de un costo”.
“No ahondar en grietas”
Antes de pronunciar su discurso, Macri estuvo en la catedral de San Miguel en el tedeum que encabezó el arzobispo Alfredo Zecca. “No hay libertad humana sin verdad”, dijo Zecca durante su homilía por los 200 años de la Independencia, con la presencia del presidente, gobernadores, autoridades nacionales y provinciales y representantes extranjeros.
Monseñor Zecca sostuvo que no era un día “para ahondar en grietas”, sino para encarar el desafío de “construir una sociedad pluralista y democrática”, al tiempo que destacó la disposición de la Iglesia “al diálogo franco, sin excluir, sino incluyendo a todos, y privilegiando a los más pobres”.
Macri escuchó la misa acompañado por su esposa Juliana Awada, la vicepresidenta Gabriela Michetti, y el gobernador de Tucumán, Juan Manzur.
Tras el tedeum, Macri se acercó unos segundos hasta la valla que daba a la catedral para saludar al público y los simpatizantes lo vitorearon con el canto partidario de Cambiemos: “Sí se puede, sí se puede”.
Luego, el mandatario brindó su discurso. Más tarde, Macri y los invitados degustaron un almuerzo en el patio trasero de la Casa Histórica. Después presenciaron un desfile folclórico, militar y escolar.
Gobernadores firmaron un acta compromiso para el tercer siglo
El presidente Mauricio Macri firmó ayer en la Sala de Jura de la Casa de Tucumán un “acta compromiso para el tercer siglo de los argentinos” junto a los gobernadores, entre ellos el mandatario santafesino Miguel Lifschitz, en el marco del Bicentenario de la Declaración de la Independencia.
Allí, el jefe del Estado y los representantes provinciales reconocieron que hay “grandes desafíos por delante” y resaltaron que “los próximos cien años serán obra de los hombres y las mujeres que comparten este tiempo, unidos en el sentimiento fraterno de una historia común”.
Destacaron que “ahora es el turno de honrar y hacer realidad los ideales que legaron los hombres de 1816 para proyectarlos a las nuevas generaciones de argentinos”.
“Nuestro primer siglo fue el de la emancipación y la organización nacional. El segundo fue el de la conquista de los derechos y la democracia. Hagamos juntos que el tercero sea el del diálogo y la convivencia, el del fin de las injusticias y el del cumplimiento irrestricto de nuestra Constitución. En paz, en unión y en libertad. ¡Viva la Patria!”, concluye el acta.
Los únicos dos gobernadores que no asistieron fueron los de Santa Cruz, Alicia Kirchner, y de Chubut, Mario Das Neves, quienes enviaron en su lugar a sus vicegobernadores, Pablo González y Mariano Arcioni, respectivamente. Otro ausente fue el mandatario de San Luis, Alberto Rodríguez Saá, quien adoptó la misma decisión que su hermano y senador, Adolfo Rodríguez Saá, de no participar de los actos oficiales.
“Deberían tener angustia de separarse de España”
A 200 años de haber roto el yugo colonial con la corona española y declarar la independencia, entre los invitados destacados estuvo el rey emérito de España Juan Carlos I. “Deberían tener angustia (los próceres) de tomar la decisión, mi querido rey, de separarse de España”, dijo el presidente Mauricio Macri al hablar en la Casa de Tucumán, frente a la presencia del rey Juan Carlos. Fue el fragmento del discurso más cuestionado y reproducido en las redes sociales por dirigentes opositores.
Críticas opositoras
Funcionarios y dirigentes vinculados al oficialismo nacional destacaron ayer el clima y la organización de los festejos por el bicentenario de la independencia argentina, mientras que algunos opositores salieron a cuestionar las políticas implementadas por el gobierno y el discurso del presidente Mauricio Macri.
El intendente de Resistencia y ex jefe de Gabinete de Cristina Kirchner, Jorge Capitanich, pronosticó que el país “va camino a una agudización de la dependencia”.
El socialista K Jorge Rivas señaló: “Los que están en el gobierno son los que quieren al país de rodillas frente a los poderosos del mundo, y los que queremos retomar el avance hacia la independencia, la justicia y la igualdad estamos en la oposición”.
