Casi por unanimidad, los docentes de Amsafé resolvieron anoche, en una asamblea provincial realizada en Santa Fe, realizar tres paros de 48 horas en las primeras tres semanas de clases: serán el martes 28 y el miércoles 29 de febrero, el miércoles 7, el jueves 8, el miércoles 14 y el jueves 15 de marzo. La decisión es un duro cachetazo para el gobierno, que había realizado una propuesta salarial en paritarias –un aumento del 21 por ciento dividido en dos etapas– que no conformó a los gremios docentes. Desde la Casa Gris advirtieron que buscarán “el modo de garantizar que los chicos tengan clases” y dijeron que si los docentes “creen que adoptando las medidas de fuerza nos van a hacer cambiar la propuesta, parten de una idea equivocada”.
En la asamblea de Amsafé votaron 29.909 afiliados. Apenas 107 –el 0,35 por ciento– lo hizo a favor de aceptar la oferta salarial del Ejecutivo; el resto –29.802 maestros, el 99,65 por ciento de los que participaron de la votación– lo hizo por las distintas modalidades que proponían medidas de fuerza. Se impuso la que promovió la Comisión Directiva del sindicato: tres jornadas de paros de 48 horas cada una. En 7 de los 19 departamentos de la provincia hubo mociones que proponían aceptar la oferta, aunque la titular de Amsafé, Sonia Alesso, aclaró que no eran de conformidad con la propuesta sino que buscaban darle un plazo de 15 días –con los maestros en el aula– al gobierno para que elabore una nueva oferta salarial.
“No vamos a iniciar las clases con esta propuesta”, declaró Alesso anoche, tras la asamblea. “Esto expresa claramente que hay un gran malestar no sólo por la oferta salarial sino por otros temas importantes como las condiciones de trabajo, los edificios escolares, la creación de cargos, la reforma curricular: una serie amplia de temas que queremos plantear y que son parte de este malestar que hay en la docencia”.
La secretaria general de Amsafé le envió un mensaje al Ejecutivo: “Apelamos a que el gobierno provincial revea su posición y mejore la propuesta. Entendemos que es posible mejorar esa propuesta; hay que seguir discutiendo hasta lograrlo. El compromiso de nuestro sindicato siempre es poder avanzar y discutir, algo que no ha sido posible esta vez”.
Alesso también remarcó lo que a entenderde los maestros es el poco tiempo que hubo entre la propuesta –que se oficializó el miércoles último– y la fecha fijada por el gobierno de Antonio Bonfatti para el inicio del ciclo lectivo: el martes 28.
La oferta salarial del Ejecutivo contemplaba un aumento del 14 por ciento en febrero más otro 7 por ciento a partir de julio. Había sido calificada como “absolutamente insuficiente” por los cuatros gremios docentes: Amsafé, Sadop, UDA y Amet. Al igual que los maestros oficiales, el resto de los sindicatos decidió idénticas medidas de fuerza.
Mientras los docentes aún votaban en las escuelas, la ministra de Educación Leticia Mengarelli hizo declaraciones que, al entender de Alesso, enardecieron a los afiliados. En una entrevista con Canal 3, la funcionaria advirtió que el gobierno provincial deberá “analizar el modo de garantizar que los chicos tengan clases”: un mensaje que, para los maestros, equivalió a poner en discusión una vez más el concepto de presentismo, algo de lo que el gobierno no habló en forma explícita.
“Deberemos analizar el modo de garantizar que los chicos tengan clases”, sostuvo Mengarelli. “Se ha hecho un gran esfuerzo para llevar una propuesta que es la que responsablemente se pueda plantear. Lo que se ofreció es lo máximo posible”, agregó, a la vez que destacó que en la ciudad de Buenos Aires los maestros aceptaron una propuesta similar a la de Santa Fe. Según la ministra, en otros distritos el aumento se escalona en tres y hasta en cuatro partes, lo cual llevará a sueldos de entre 2.800 y 3.500 pesos en octubre, mientras que Santa Fe propuso 4.025 pesos –incluido el incentivo docente– en julio. “Es la mejor oferta del país”, ponderó Mengarelli.
No obstante, Alesso sostuvo: “Las declaraciones de la ministra enojaron mucho más a los docentes. Creo que en realidad no aporta a la salida de un conflicto. Aquí hay un conflicto que tiene que ver con una serie de temas, no solamente el salarial; hay un malestar de la docencia que la ministra tendrá que analizar”.
También el ministro de Gobierno Rubén Galassi había hecho declaraciones dirigidas a los docentes antes de conocerse la resolución final de los gremios, que de todas maneras era un secreto a voces. “Curiosamente, castigan a la provincia que hizo la mejor propuesta”, dijo el funcionario en LT10. Y lanzó una advertencia: “Nosotros hemos hecho una propuesta razonable y seria, los números son públicos. Si (los docentes) creen que adoptando las medidas de fuerza nos van a hacer cambiar la propuesta, creo que parten de una idea equivocada porque se ha hecho un gran esfuerzo para poder arribar a esta propuesta”.