El Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°4 condenó a siete personas en el marco de la causa en la que se investigó la Mafia del Oro, al encontrar acreditado que montaron y utilizaron una estructura empresarial para defraudar al Estado nacional entre 1993 y 1995 mediante la simulación de cadenas comerciales que permitía el reintegro de impuestos que nunca habían ingresado a las arcas públicas, por un total cercano a los 20 millones de pesos/dólares. En el debate oral y público –que comenzó en noviembre del año pasado– intervino el fiscal general Diego Velasco junto con Liliana Ormachea como fiscal ad-hoc.
Los jueces Néstor Costabel, Pablo Bertuzzi y Enrique Pose les impusieron el viernes pasado penas de tres años de ejecución condicional y multas por el delito de asociación ilícita a Carlos Axel Augspach –presidente de Refinerías Riojanas SA y de la firma extranjera Handy y Harman–, Guillermo Jorge Campbell –ex secretario de Relaciones Exteriores y Culto y luego de Relaciones Económicas, y asesor de Casa Piana SA–, Mario Jorge Grinschpun –socio y gerente de Express SRL y despachante de Aduana–, Edgardo Enrique Roggenbau –presidente de Casa Eise SA– y Luis Eduardo Riccigliano –socio gerente de la firma Rodhio SRL–, los dos últimos en concurso real con defraudación a la administración pública, en tanto que Marcelo De Laurentis –residente de Dallas Instrumentos SA– y Alberto Giusti –presidente y accionista de Tecnometal SA y accionista de Romaer SA– fueron condenados a dos años, también de ejecución condicional, por su participación necesaria en el delito de defraudación a la administración pública. Por otro lado, Luis Roberto Limardo, Susana Mónica Ros, Carlos Francisco Tarsitano, Jorge Alberto Mencarini, Antonio Roberto Lanusse y Marcelo Avogadro –ex subsecretario de Relaciones Comerciales– fueron absueltos, al no haber mediado acusación durante los alegatos del Ministerio Público Fiscal y las querellas de la Afip y la Dirección General de Aduanas.
Tras rechazar todos los planteos interpuestos por las defensas, los magistrados comunicaron que el próximo 14 de agosto, a las 14, se realizará la lectura integral de la sentencia.
Las maniobras investigadas
Durante el proceso se investigaron los hechos cometidos por el que fuera llamado Grupo Piana, cuyos integrantes, en términos generales, montaron y utilizaron una estructura empresarial a los fines de defraudar al Estado Nacional mediante la simulación de cadenas de operaciones comerciales entre empresas, en las que determinadas firmas figuraban interviniendo en ese proceso de comercialización de productos que luego eran exportados; así, se aprovechaban fraudulentamente del régimen de beneficios que para las exportaciones preveía la ley del Impuesto al Valor Agregado, logrando que el ente fiscal les otorgara reintegros de impuestos que en realidad nunca habían ingresado a las arcas del Estado. A través de una veintena de hechos que llegaron a la etapa de juicio oral, las operaciones simuladas creaban falsamente o inflaban los precios de los productos, generándose a favor de las firmas exportadoras un crédito.
Finalmente, el crédito fiscal obtenido era reintegrado por la DGI, lo que significó para el fisco un perjuicio superior a los diecinueve millones de pesos.
Caso Piana
Los principales directivos de Casa Piana, Enrique Piana y Miguel Seligman habían sido condenados por el mismo tribunal en febrero de 2014. En aquella ocasión, a Piana se le impuso una pena de seis años de prisión, al ser encontrado autor de 19 hechos de defraudación a la administración pública y asociación ilícita, en carácter de jefe y organizador. La condena se le unificó en una pena única de 8 años y dos meses de prisión, en virtud de otra que había sido dictada por el Tribunal en lo Penal Económico N° 1. Seligman, por su parte, fue sentenciado a tres años de prisión en suspenso.