Un ex combatiente inglés quiere devolver a soldados argentinos unos documentos que quedaron olvidados, tras la retirada de las tropas de Puerto Argentino.
Treinta años después de la guerra de Malvinas, un ex combatiente británico tiene todavía una misión que cumplir, pero en este caso es enteramente humanística: devolverle a soldados argentinos unos documentos que quedaron olvidados, tras la retirada de las tropas de Puerto Argentino.
Mark Bonney, un ex militar que pertenecía a la Royal Air Force en 1982, encontró en una oficina de las Malvinas devastada por el conflicto unos pocos billetes de 100.000 pesos argentinos de esos años (poco menos de 7 dólares) y unos papeles tirados en un tacho de basura.
“Nos dimos cuenta que era imposible saber si esta gente estaba viva. Posiblemente fueron enviados a quienes estaban sirviendo en esos puestos y que ya habían fallecido”, relató.
Entre los documentos hay un cheque del Banco Nación a nombre de Daniel Domeracki y un recibo bancario de Luciano Enrique Amoddio, fechados el 16 de abril y el 6 de abril de 1982, respectivamente. Télam pudo contactarse con ellos y comprobó que viven en la provincia de Misiones.
“Estoy impresionado”, dijo Domeracki al enterarse. Sobre todo porque no recuerda haber cobrado alguna vez un cheque en su tiempo en la «colimba».
Lo que sí recuerda es haber ido a combate con tan sólo 19 años y las diferencias que había entre los ejércitos: “De nuestras armas no salía ni un tiro y las de ellos tiraban cuatro municiones distintas. Nosotros no podíamos ni caminar con todo lo que teníamos puesto por el frío y ellos tenían un chaleco que con una batería les daba calor”.
Por su parte Amoddio, que actualmente sigue en actividad militar con el grado de coronel a pocos días de pasar a retiro, tampoco disimuló su sorpresa y cree que el hallazgo se trata de un dinero que le habría enviado una tía que tiene en Australia por su casamiento ocurrido en enero de aquél 1982.
“El sello del Banco Nación dice 22 de abril de 1982. En esa fecha ya estaba en Malvinas y mi señora se había trasladado a Posadas. Por lo tanto, supongo que lo reenviaron al último sitio donde me podían localizar: las islas. Pero nunca lo recibí”, relató.
El militar contó que “sería increíble recibir un regalo de casamiento 30 años después y gracias a Malvinas”. Entre los documentos también apareció un telegrama interno firmado por un comisario de apellido Barella y un giro postal.
En todos los papeles figuran domicilios de la ciudad correntina de Monte Caseros y hacen referencia a la Compañía de Ingenieros 3 de esa localidad, a la cual Domeracki y Amoddio pertenecieron y que actuó en Malvinas.
“Todos los documentos fueron guardados en una carpeta junto a un crucifijo que encontré junto a una Biblia quemada. No soy un hombre religioso, sin embargo sí soy espiritual y creo que el joven que fue llevado a la batalla se sintió reconfortado en la protección de su símbolo de Fe”, explicó el inglés Booney en el diálogo con Télam.
El veterano británico agregó con la voz quebrada por las heridas de los ex combatientes, de ambos lados, que tres décadas después siguen abiertas que «en el libro no figura ninguna inscripción, probablemente por las quemaduras y el daño causado por el clima y la lluvia”.
Su historia salió a la luz esta semana cuando Bonney fue invitado a participar en un programa de radio que se emite por la BBC en su regional Yorkshire, al norte de Inglaterra.
De la emisión también participó Carolina, una oyente argentina residente en el Reino Unido que solo dio su nombre. “Mi corazón está con vos y con todos los que estuvieron en esa horrible guerra. Es conmovedor escuchar todo lo que significa, aún 30 años después”, manifestó.
“En aquellos años Argentina estaba bajo una dictadura militar. Antes que empezara la guerra miles de argentinos fueron torturados y desaparecidos. Hubo intentos de encubrimiento, primero con la Copa del Mundo 1978, que intentó reflotar el nacionalismo, y después con la guerra”, dijo Carolina.
La mujer contó que durante el conflicto era una adolescente y recordó que “los medios argentinos estaban manipulados por la dictadura. Los diarios decían que iban a atacar Buenos Aires o hablaban de triunfos que nunca existieron”.
Cuando el presentador del programa le dijo a Bonney si tenía un mensaje para su interlocutora, él le contó la historia del hallazgo de estos documentos.
“Sería maravilloso que lo tengan sus verdaderos dueños o su familia”, comentó el ex soldado que luego de muchos años de pelear con las secuelas de la guerra encontró parte de la tranquilidad en el reiki, (la técnica de armonización japonesa) de la que hoy en día es instructor, y junto a su familia, mujer, hijos y tres décadas después, también nietos.