Manuel Córdoba se presentó en la noche del miércoles con Búcaros en la burbuja de Cali, en donde se inició una nueva edición de la Liga de Colombia. El entrenador nicoleño y su equipo perdieron por 99 a 97 ante Cimarrones pero en esta charla con El Hincha repasó cómo se maneja el particular formato ideado para minimizar el riesgo de contagio de coronavirus y poder llevar adelante la competencia.
“La primera medida que se tomó fue que los extranjeros se realizaran un PCR 96 horas antes de entrar al país sin excepción. Todos aquellos que no lo tenían de esa forma fueron enviados de regreso, algo que nos pasó con uno de nuestros jugadores, que se hizo un test rápido en lugar de un PCR. En el caso de los nacionales, se les realizó un PCR antes de ingresar a la burbuja en el hotel de los elencos”, explicó Córdoba, quien también detalló cómo viven desde ese momento en el que quedaron afectados al torneo: “A partir del domingo a las 11 de la mañana nadie puede entrar o salir del hotel salvo al colectivo para ir a entrenar o para jugar los partidos desde el miércoles. Hay dos canchas aquí en el complejo que se utiliza en Cali, la principal en la que jugamos y la auxiliar en la que también se puede entrenar. Cada uno debe desinfectarse las manos y el calzado cada vez que entra y sale del hotel, del gimnasio o del transporte. Comemos dentro del hotel y estamos en las habitaciones”.
En ese contexto, el básquet quedó en segundo plano en los primeros días, algo poco acostumbrado a un perfeccionista como es Manuel Córdoba, pero que también sabe comprender las circunstancias: “Pudimos hacer los primeros entrenamientos con el equipo casi completo recién el domingo y lamentablemente sufrimos un par de lesiones. Eso sumado a que Lucas Ortiz no pudo venir por cuestiones personales y Rodrigo Gallegos por lo difícil que se hacían los traslados desde Argentina. Esperamos poder contar con el extranjero que nos falta lo más pronto posible, pero todavía nos falta muchísimo y sabíamos que el debut iba a ser una incógnita. Pero los chicos tienen la mejor predisposición y con el transcurrir del torneo buscaremos nuestra mejor forma”.
A la espera de poder retomar su actividad en Chile con Valdivia, poder estar desarrollando este desafío en Búcaros y tener una nueva oportunidad en Colombia le da a Manuel Córdoba la chance de tener una mirada positiva de la situación especial que vive el deporte y comprender que es imposible tener una competencia con los tiempos y formas que se vivían en la previa del coronavirus: “Las ganas de volver a jugar y vivir el básquet después de tanto tiempo son muy grandes y por eso todos comprendemos la situación y damos lo mejor para que salga bien”.
Ya se disputó el salto inicial y por un tiempo, el DT estará inmerso en la burbuja. Lo bueno es que es una burbuja en la que se respira básquet.