En la previa de un duelo que fue viralizado más como el choque de astros entre Lionel Messi y Cristiano Ronaldo que entre las selecciones de Argentina y Portugal, el entrenador albiceleste Gerardo Martino admitió hoy que la «Pulga» es su «debilidad», por lo que no podría ser un «buen jurado» para votar en la elección del Balón de Oro.
«No soy un buen jurado para votar, mi corazón es argentino, mi debilidad es Messi y pase lo que pase en el año futbolístico siempre lo voy a votar a él, no soy absolutamente objetivo», se sinceró Martino.
En conferencia de prensa en el estadio Old Trafford, luego de la última práctica de la Selección antes del encuentro con Portugal, el «Tata» agregó que no puede «obviar el hecho futbolístico y la forma en que Messi lo lleva adelante y la manera en que ejecuta».
«Si fueran muchos los que piensan como yo habría que replantearse que haya otros jurados», bromeó, y completó: «No sé los parámetros que definen quién es el mejor futbolista del año, pero en mi opinión no define nada este partido respecto a la elección del Balón de Oro».
Martino, que también ponderó la versatilidad del rosarino Ángel Di María, «unfutbolista top en el mundo», remarcó que al igual que ocurrió durante la gira en Asia, la intención de esta semana de trabajo con la Selección es «seguir incorporando conceptos» para el objetivo principal a corto plazo que es la Copa América de Chile 2015.
«La idea es seguir incorporando conceptos, nuestra intención siempre será jugar contra rivales importantes. Lo que tiene una envergadura distinta esta vez será el escenario», indicó sobre el mítico Old Trafford que visitará con la Selección.
«Las sensaciones para cada gira son y serán similares, tratar de convivir, tener entrenamientos y partidos de nivel, pero seguirá siendo importante en el objetivo fundamental a corto plazo que es la Copa América. A veces los entrenadores tratamos de disfrazar la importancia de los partidos y colocarlos todos en la misma línea, nosotros no podemos retroceder en lo que ofrezca el equipo, pero está claro que tanto para Argentina y Portugal sus objetivos lo tienen en otro lado, dentro de eso surgió un enfrentamiento amistoso y hay un prestigio para defender», explicó.
El «Tata» no quiso puntualizar en qué equipos o selecciones le gustaría imitar en el juego con la Argentina, porque «es muy difícil hacerlo de equipos que no me tocaron dirigir», aunque dio algunos indicios.
«Quizás diría la presión de Paraguay, el juego de Newell´s, y habida cuenta que el Barcelona que yo dirigí no fue la mejor, tendría que remitirme al Barcelona de Pep y tengo que recurrir a equipos que yo dirigí y que lo siento como propio. Es mucho más difícil imitar algo de lo que no se participa», admitió.
«Hay que cerrarle espacios a Cristiano»
Más allá de su preferencia por Messi, el entrenador de la Selección no esconde la importancia y el peso que Cristiano Ronaldo tiene, principalmente, en Portugal.
Por eso, y con el antecedente cercano de los problemas que generó Neymar en el Superclásico de las Américas en China, Martino sabe que deberá «cerrarle espacios» a Cristiano.
«En particular sobre este partido, no tenemos que darle espacios a Cristiano Ronaldo. Con Brasil nos explotaron muy bien a Neymar y podría pasar algo parecido aquí. No hay algo especial de marcaje sobre Cristiano, sino la atención que generan estos futbolistas. De manera escalonada vamos a tratar de cerrarle los espacios y rodearlo en los momentos de dribbling o remate, que es otra de las armas que tiene», explicó.
También profundizó conceptos sobre su intención de recuperación «inmediata» del balón y el famoso retroceso, que tanto preocupa cuando se intenta involucrar mucha gente en ataque.
«Hace pocos días leía un artículo que decía que el final de la posesión no terminaba cuando se perdía la pelota, sino cuando se volvía a recuperar. Nosotros más que entrenar el retroceso, que sería la segunda parte de la recuperación, lo que tenemos que entrenar es la recuperación inmediata, porque además es un hecho más fácil, porque al tener mucha gente involucrada en ataque, si buscamos recuperar la pelota en el lugar donde más jugadores quedaron cerca del balón debería ser más sencillo. Eso es lo que intentamos hacer», analizó.