Se bajó solito. Gerardo Martino era para muchos uno de los principales candidatos a ocupar el cargo de entrenador de la selección, aunque él mismo se encargó de tachar su nombre de la lista de posibles sucesores de Jorge Sampaoli. Y lo hizo con una dura crítica al fútbol argentino en general y también a los que toman las decisiones.
El Tata, que tiene una oferta muy seductora para ir a dirigir la selección de México, charló mano a mano con el periodista Daniel Arcucci, quien desde su blog personal reveló algunas de las mejores frases que dejó el encuentro con el actual DT del Atlanta United de la Mayor League Soccer de Estados Unidos.
“Incluso desde lejos se notan peor a las condiciones” consideró Martino, quien enseguida agregó que todo “ha cambiado muy poco” desde su renuncia hace poco más de dos años.
Luego de que hace unos días Mauricio Pochettino dijera que es inviable su llegada a la selección nacional, el Tata sin ser tan tajante dio a entender que no están las condiciones dadas para su retorno.
“Con lo que representó la muerte de Julio Grondona, era bastante lógico que haya un momento de confusión más allá que eso se prolongó y terminó en un bochorno”, rememoró Martino sobre parte de su proceso.
No obstante, el Tata fue duro con la situación dada cuando River y Boca pusieron objeciones para ceder a futbolistas para la gira por Arabia Saudita ante Irak y Brasil por diversas lesiones. “Al haber una conducción como la de Chiqui (Tapia), que fue electo de manera democrática, que se haya producido un hecho así, me recuerda a lo que me pasó a mí ante de los Juegos. Y noto que dos años después el hecho se repite. Pienso que ha cambiado muy poco y que se está peor”, sentenció Martino, quien había renunciado a la selección en junio de 2016 cuando muchos clubes le negaron futbolistas para entrenarse de cara a los Juegos Olímpicos de Río 2016.
Así las cosas, la lista de posibles sucesores del Zurdo Sampaoli se achica cada vez y la opción más firme para AFA parece ser la continuidad del interinato de Lionel Scaloni, quien cansado de algunas desprolijidades también evalúa la chance de no aceptar en caso de que le hagan esa propuesta.