La ciudad se vistió con los colores del arcoíris para celebrar la diversidad y pelear por derechos que garanticen condiciones de vida digna. Este sábado 7 de octubre se realizó la 17ª Marcha del Orgullo que, como todos los años, unió la plaza Libertad –ícono de las luchas LGBTIQ+ en Rosario– con el Monumento a la Bandera. Este 2023, a dos semanas de las próximas elecciones presidenciales, más de 70 mil personas se unieron en el mismo grito: «Libertad es memoria y orgullo. Violencia antiderechos Nunca Más».
Para la comunidad LGBTIQ+ lucha es sinónimo de fiesta. Una vez al año, las cuerpas marchan para reivindicar los derechos adquiridos, para reclamar por los que faltan y para decirle “no” a los posibles retrocesos. A principios de octubre, Rosario se vuelve multicolor y por un día se entrega a una celebración queer, con una decena de carrozas, brillos, música y política en las calles.
Desde el 30 de septiembre, en Rosario hubo actividades culturales, deportivas, recreativas y de debate que formaron parte de la Semana del Orgullo. El evento central y cúlmine fue la 17ª Marcha del Orgullo.
El tono de los posicionamientos estuvo marcado por la coyuntura: en dos semanas, la Argentina elegirá a su nuevo presidente y, frente al avance de las derechas que prometen poner en jaque algunos derechos conquistados por el colectivo LGBTIQNB+, se plantean resistencias. «Milei no sos mi ley», podía leerse en carteles que sostenían lxs manifestantxs.
Desde las 13 del sábado se montó en la plaza Libertad (Mitre y Pasco) la Feria Orgullosa, de la que participaron 200 feriantes. También se montó el Escenario de la Plaza, un espacio para promover y potenciar artistas disidentes emergentes de la ciudad como Beige Brooklyn, Dardo Roth, Jerónimo Toqero, Maitea, Maxi con X y Milu Neri. La conducción estuvo en manos de Lucas Miró.
A las 17 se dio inicio a la Marcha del Orgullo, que partió rumbo al Parque Nacional a la Bandera. «Tengamos memoria, recordemos a nuestros compeñerxs que dejaron la vida para que hoy tengamos Matrimonio Igualitario, Ley de identidad de género. Tengamos memoria. Eso es la libertad. Es la Memoria y es el Orgullo», sostuvieron desde la propaladora que encabezaba la marcha.
El reclamo por la continuidad de la ESI fue otro de los posicionamientos más fuertes.
En la manifestación, que se abrió paso por Pellegrini cual pasarela de ballroom, hubo una decena de carrozas y una cuerda de tambores que le sumaron música, color y alegría a la marcha que justamente reivindicaba esas consignas, leitmotiv de la convocatoria: «Libertad es memoria y orgullo. Violencia antiderechos Nunca Más» y «A 40 años de democracia, reparación travesti-trans post dictadura».
En el escenario montado junto al río se dio lectura a la proclama política elaborado por más de 40 organizaciones LGBTIQNB+ de la ciudad, que todos los años condensa los principales reclamos del colectivo. A dos semanas de las elecciones presidenciales, los posicionamientos se centraron en las agendas de los distintos candidatos. El acto central fue conducido por Naty Vila, Manu López y Miya Vargas.
A las 20 comenzó el Festival Orgulloso, que contó con la participación de VJ Diego Bonzi y las Ibiza Pareo, con cierre a cargo de la DJ trans rosarina Laurita Gosh.
Desde la Comisión Organizadora destacaron el inmenso trabajo militante y voluntario que se realizó durante meses para construir este evento masivo. También hicieron énfasis en el aporte que hace toda la comunidad con la compra de los abanicos diseñados especialmente para la Marcha del Orgullo de Rosario y cuya ganancia se destina íntegramente para el pago de artistas y la técnica del festival de cierre.
El documento unificado de la 17ª Marcha del Orgullo
¡Hoy nuevamente somos decenas de miles en las calles rosarinas! ¡Volvemos a demostrar que existimos, que nuestras cuerpas y sueños estallan de Orgullo, que Nunca Más vamos a volver a los clósets, que nuestra comunidad está más fuerte que nunca!
También volvemos a gritar por todo lo que nos falta para vivir bien, con todos nuestros reclamos en alto, por todos los derechos y políticas públicas que nos faltan o no se cumplen, por una situación económica que nos afecta más que a nadie, porque luchamos y exigimos mucho más de esta democracia.
No obstante, a todos esos discursos de odio que crecen en la sociedad, alimentados por los medios de comunicación, sectores políticos y religiosos, ¡les respondemos con más libertad! A la escalada de violencia antiderechos que amenaza la democracia, ¡la paramos con más Orgullo! Porque el orgullo es lucha, hoy más que nunca, decimos: ¡Ni un paso atrás ante el avance de la ultraderecha! Frenemos la difusión de discursos y proyectos políticos de odio que nos tienen como objetivo junto con las poblaciones excluidas por pobreza y racialidad.
Y aunque todos los días existan vulneraciones y violencias hacia nosotres, como sujetes politiques disidentes, no vamos a dejar de luchar por defender lo conquistado hasta ahora. Nuestros derechos y todas las instituciones que acompañan su garantía son fundamentales para una democracia fuerte.
Nuestras marchas nacen ante el deseo de ganar libertades. Son décadas de luchas colectivas las que nos respaldan cuando decimos que no vamos a dar ni un paso atrás. La Marcha del Orgullo es un espacio político y de resistencia.
Por eso hoy luchamos por un Estado más fuerte y presente que se haga cargo de garantizar nuestros derechos, que son derechos humanos.
Milei y Bullrich son una amenaza terrible para nuestra comunidad y desde esta enorme Marcha que construimos juntes, les decimos que NO, que sus proyectos de odio, violencia y exclusión ¡NO PASARÁN!
Por todo esto, por nuestras vidas, por nuestros derechos, por nuestras familias, por nuestros sueños, y frente a la amenaza democrática y al odio que tenemos en frente, nos posicionamos y retrucamos: ¡LA LIBERTAD ES COLECTIVA, LA LIBERTAD ES CON LE OTRE, LA LIBERTAD ES PARA TODES O NO ES! ¡A nuestro Orgullo no lo escondemos NUNCA MÁS!
¡NUESTRO VOTO VALE!
Vayamos a votar porque cada voto cuenta. Ni Antiderechos, Ni en Blanco porque, tenemos con qué, tu Voto Vale!
¡MÁS ORGULLO! ¡MÁS LIBERTAD!
¡Violencia antiderechos NUNCA MÁS!