Al menos 92 personas murieron en el naufragio del barco de inmigrantes frente a las costas de la isla siciliana de Lampedusa y 150 fueron rescatadas, informaron este jueves a la AFP fuentes de la Guardia Costera.
«Por el momento hemos hallado 92 muertos. La búsqueda de sobrevivientes sigue», precisó el vocero de la entidad. Según medios de prensa local entre 400 a 500 inmigrantes, entre ellos numerosas mujeres y niños, se encontraban a bordo de la embarcación que naufragó. «Se trata de una tragedia inmensa», comentó consternada la alcaldesa de Lampedusa, Giusi Nicolini.
Según los relatos de los sobrevivientes la tragedia ocurrió tras encender un fuego para llamar la atención de las autoridades italianas después de llevar horas en alta mar.
Pero la barcaza se incendió, cundió el pánico, muchos inmigrantes se arrojaron al mar, desestabilizando la embarcación, que volcó.
La mayoría de los inmigrantes proceden de Eritrea y Somalia y zarparon de las costas de Libia, precisaron fuentes locales. «Venga a contar los muertos conmigo», escribió la alcaldesa en un telegrama dirigido al primer ministro Enrico Letta.
Las autoridades de la isla solicitan desde hace meses ayuda para hacer frente al fenómeno, denunciado también por el papa Francisco durante su visita a la isla en julio pasado. En lo que va del 2013 más de 22.000 inmigrantes desembarcaron en las costas del sur de Italia (Sicilia y Calabria), es decir, casi tres veces más que en todo 2012.
En la operación de rescate participa la Guardia Costera italiana, la policía de fronteras italiana y barcos pesqueros y privados.