Al grito de»¡acaben con ellos¡» pistoleros encapuchados irrumpieron en una fiesta y mataron a 14 jóvenes en un nuevo baño de sangre que atizó el miedo en Ciudad Juárez, la más violenta de México.
Armados con fusiles de asalto, los pistoleros invadieron una casa en la que se festejaba un cumpleaños de 15 y abrieron fuego indiscriminadamente durante unos 5 minutos. Además de los 14 muertos hay 19 heridos, entre ellos dos niños de siete y 11 años.
«¡Acaben con ellos¡» ordenó uno de los encapuchados y de inmediato comenzaron a disparar, dijo uno de los sobrevivientes a medios locales.
«No hay un móvil determinado para la ejecución de las catorce personas» dijo Carlos Manuel Salas, fiscal de Chihuahua, el estado al que pertenece Ciudad Juarez.
En el lugar los investigadores encontraron más de 70 casquillos del calibre 7.62 X 39 (cuerno de Chivo) y .223 (R15), según dijo el fiscal.
La fiscalía responsabilizó a la banda «Los Aztecas» por esa masacre, aunque hasta el momento no se han establecido los motivos y tampoco se ha detenido a nadie. Esa banda surgió en cárceles del vecino estado de Texas (EEUU) hace 20 años y se convirtió en el brazo armado del cartel de Juárez.
Con apenas 1,2 millones de habitantes y frente a la ciudad texana de El Paso, Ciudad Juárez es presa de la violencia del narcotráfico.
Tras el crimen la casa fue acordonada por la policía pero desde la calle se alcanzaba a ver en el piso bolsas y restos de comida en medio de charcos de sangre.
Escondidos en sus viviendas, los vecinos atemorizados evadían a los periodistas. La zona residencial donde ocurrió la matanza está a menos de 2 kilómetros de donde ocurrió otra masacre en enero pasado, en la que murieron 16 jóvenes por un comando armado que también irrumpió a balazos en una fiesta.
«Váyase, váyase por favor no me comprometa, no puedo hablar, si lo hago vienen por mí los matones. Eso nos gritaron anoche», respondió angustiada una vecina.
«Uno de los muertos es mi sobrino y no andaba en malos pasos, no sé por qué lo mataron esos malditos», dijo cortante antes de cerrar la puerta.
Medios locales mostraron imágenes de cadáveres en la cochera de la vivienda junto a automóviles. El parte policial dijo la noche de ayer que algunos de los asistentes a la fiesta intentaron huir. Uno de ellos lo hizo saltando por los techos de casas contiguas pero fue alcanzado por las balas.
Unas 6.500 personas han sido asesinadas en los últimos tres años en Ciudad Juárez en donde los cárteles de Juárez y Sinaloa luchan desde 2009 por las rutas del narcotráfico hacia Estados Unidos y el mercado local.
Además de la masacre en la fiesta, otras 13 personas murieron asesinadas entre la noche del viernes y el sábado en Chihuahua en diferentes hechos, una cifra que se ha hecho casi habitual.
La violencia ligada al narcotráfico ha dejado más de 7.000 muertos en México este año, según un balance de la Procuraduría federal, lo que lo convierte en el más violento desde que en diciembre de 2006 el gobierno lanzó una ofensiva contra los cárteles con el despliegue de 50.000 militares.