El precandidato presidencial por el Frente Renovador (FR), Sergio Massa, confirmó hoy que su postulación «llegará a octubre, más allá de un dirigente más o menos», en alusión al distanciamiento de algunos intendentes que formaban parte de ese espacio.
Massa destacó en primer lugar el acto que encabezó el 1 de mayo último en el estadio de Vélez Sarsfield al señalar que «fue un éxito que nadie esperaba» y puso de relieve que «la gente se quedó a pesar de que llovió dos veces».
El precandidato presidencial minimizó recientes fugas en el FR, como la del intendente de Malvinas Argentinas, Jesús Cariglino, y agregó: «A la gente no le importa los amonotonamientos de dirigentes. Nosotros vamos a llegar a octubre, más allá de un dirigente más o menos».
«Para nosotros es importante la gente, porque sino parece que es más importante una foto o una rosca que lo que le pasa a un ciudadano de a pie», añadió el líder del FR en declaraciones radiales.
A su vez, volvió a rechazar los mensajes para bajar su candidatura a la Gobernación bonaerense, al señalar que «esta es una carrera larga, una maratón, en la que hay que tener la convicción de llegar hasta el final».
El diputado y exintendente de Tigre busca capitalizar lo que en el seno de las filas del FR denominan el «efecto Vélez», en referencia al masivo acto que encabezó en el José Amalfitani, y también el reciente acuerdo con el precandidato presidencial y gobernador de Córdoba, José Manuel De la Sota.
En el Frente Renovador consideran que lograron pasar el obstáculo de abril, definido por los voceros del partido como el mes que «trataron de bajar» a Massa de la carrera presidencial a la provincia de Buenos Aires y que el acto en Vélez y el acuerdo con De la Sota les dio un nuevo envión.
Fuentes del partido consultadas por NA indicaron que la provincia de Buenos Aires (distrito fuerte del FR) más Córdoba representan el 50 por ciento del padrón, razón por la cual los entusiasmó el acuerdo con De la Sota.
Por otra parte, afirmaron que «se acabó la paciencia con los indecisos» pero aseguraron que el precandidato a gobernador bonaerense Darío Giustozzi (cuya permanencia en el FR es objeto de rumores desde hacer varios días) habló con Massa y acordaron salir a recorrer la provincia juntos.
Además, tras la ceremonia en el estadio de Liniers, Massa recibió una encuesta nacional que muestra una recuperación que lo llegaría a empatar con Mauricio Macri pero todavía lejos de Daniel Scioli, sus principales competidores.
En tanto, este viernes el precandidato presidencial se mostró junto al intendente de Pilar, Humberto Zúccaro, uno de los hombres de su partido que había elogiado públicamente a Macri, aunque ahora el jefe comunal ratificó su pertenencia al FR.
«Como buen peronista soy verticalista. Yo no voy a ser cómplice de la Argentina del ajuste, voy con Massa a la Argentina del futuro»», afirmó Zúccaro, al confirmar su alineamiento con el líder del FR, con quien recorrió la planta de la compañía JBS Swift en ese municipio bonaerense.
Allí, Massa elogió la gestión de Zúccaro y consideró que «Pilar es un modelo» porque «ha construido un parque industrial que tiene el 8% del Producto Bruto de la Provincia acumulado en unos poquitos kilómetros cuadrados».
Por último, señaló que Zúccaro es «un intendente que está al lado de los que producen, de los que trabajan y que lo que necesitan es que la agenda nacional los incluya y se ocupe de estos temas, de ayudar a que Pilar cada vez crezca más y que cada vez más vecinos de la región trabajen acá con mejor infraestructura, y la energía que necesitan».
